La Xunta señala que la alternativa única de Cíes «ten poucas ou nulas posibilidades de éxito»
24 ago 2019 . Actualizado a las 14:26 h.Abel Caballero prosigue su batalla contra la candidatura del Parque Nacional das Illas Atlánticas a patrimonio de la humanidad. Esta propuesta de la Xunta ya está incluida en la lista indicativa de la Unesco, un paso previo para su proclamación posterior, pero el regidor socialista advirtió ayer: «Sin el alcalde de Vigo jamás habrá candidatura de Illas Atlánticas». Incidió en que la impulsada por la Xunta no cuenta con el consenso ni de la ciudad a la que pertenecen las Cíes ni de otros municipios afectados, como Bueu. «Fracasará estrepitosamente», sentenció.
El alcalde vigués insistió en que la Xunta debe retirar su proyecto y apoyar el de las islas Cíes en exclusiva que él promueve. Criticó al Gobierno autónomo por intentar «frenar» la candidatura que lanzó el Concello en su momento y para la que inició una recogida de firmas. En este sentido, acusó a la Xunta de idear una candidatura «contra Vigo, contra el alcalde de Vigo, contra Bueu y contra los vecinos de Ons, y contra la candidatura de Cíes», porque no fue consultada con nadie de los directamente afectados.
A ese respecto, recordó que el gobierno vigués inició los trabajos en el 2013, encargando estudios científicos, mientras que la Xunta presentó su candidatura en el 2017, «maniobrando torticeramente» en un ejemplo de «abuso político». Todo, en su opinión, para perjudicar a la propuesta viguesa. Según Caballero, la candidatura de las Illas Atlánticas «no cumple» con los requisitos que impone la Unesco y, a pesar de ello, la Xunta la presentó «engañando al Ministerio de Cultura y a dieciséis comunidades autónomas».
La Xunta replica que «porfiar nunha potencial candidatura coas Cíes, cando a candidatura Illas Cíes-Parque Nacional Illas Atlántica xa está incluída na lista indicativa nacional e rexistrada como candidatura na Unesco, é obstinarse en facer dano, non só ao resto de concellos e comarcas incluídos no parque nacional, senón ao propio Concello de Vigo, xa que a alternativa ten poucas ou nulas posibilidades de éxito».