Cae una banda que viajaba de Madrid a Galicia para asaltar naves y chalés y arrancar cajeros automáticos

José Manuel Pan / Mónica P. Vilar REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

Guardia Civil

Los asaltantes usaban inhibidores para desactivar las alarmas y se comunicaban con «walkie-talkies»

22 may 2019 . Actualizado a las 13:54 h.

La Guardia Civil tiene acreditada su presencia en Galicia en al menos dos ocasiones. Una en enero y otra en febrero. De cada vez solo estuvieron unos días, suficientes para asaltar chalés y naves industriales en las provincias de A Coruña y Lugo. Estaban especializados en ese tipo de acciones, pero los investigadores también les atribuyen el robo de cajeros automáticos, que arrancaban de la pared y se llevaban en maleteros de coches. Así lo hicieron en un barrio de A Coruña y en varias zonas de Guipúzcoa, donde la Ertzaina detectó ese tipo de asaltos. Esa era la forma de actuar de una banda de albano-kosovares que fue desarticulada por la Guardia Civil la pasada semana.

Agentes de la Policía Judicial de la Guardia Civil de A Coruña iniciaron las investigaciones tras tener constancia de varios robos en naves industriales a finales de enero. Pronto pudieron constatar que los miembros de la banda tenían su residencia en Madrid, por lo que solicitaron ayuda a sus compañeros de Madrid.

 

Allí fueron detenidos cinco varones de entre 24 y 41 años y se registraron varias viviendas en los barrios de Usera, Villaverde y Carabanchel alto, donde se les incautaron herramientas, joyas, relojes y ropa de marcas de lujo, además de una importante cantidad de dinero y documentación con los estudios que hacían de los lugares que pretendían asaltar.

Los miembros de la banda dominaban especialmente el robo en naves industriales. Solían entrar haciendo un butrón en la pared y además utilizaban inhibidores de frecuencia para inutilizar las alarmas, lo que impedía que las centrales de seguridad los detectasen al entrar en las naves.

Pero también asaltaban chalés. Los investigadores creen que en una misma tarde robaron en tres viviendas de Oleiros y en una nave industrial de otro municipio. En una de las casas robaron un coche de alta gama con el que se desplazaron al País Vasco para seguir cometiendo robos allí.

Cuando venían a Galicia lo hacían en coches robados en Madrid a los que les ponían placas de matrícula falsificadas. Aquí se alojaban en habitaciones en pisos de otros compatriotas para no levantar sospechas. También se les atribuyen acciones en otras zonas de España.

Los detenidos cuentan con numerosos antecedentes y además tienen órdenes de expulsión de España. Ahora se les imputan delitos de organización criminal, robo con fuerza, robo de vehículos, falsedad documental y delitos contra la seguridad del tráfico. El juez del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 3, que dirigió las investigaciones, ordenó prisión para todos los detenidos.