Las constructoras proponen que se paguen también peajes en las autovías

Carlos Punzón
carlos punzón VIGO / LA VOZ

GALICIA

xoan a. soler

Plantean una tarifa variable de entre 1 y 3 céntimos por kilómetro para turismos

13 nov 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

El Gobierno está dispuesto a estudiar la implantación de peajes en las autovías, y las grandes empresas constructoras del país no solo apoyan dicha posibilidad, sino que aportan ya al Ejecutivo argumentos y estudios económicos de cómo se podría hacer y qué aportaría el cobro por circular por esas vías de alta capacidad.

La Asociación de Empresas Constructoras y Concesionarias de Infraestructuras (Seopan) considera que para el horizonte de los próximos 25 años las autopistas y autovías del país podrían contar con un peaje de entre 1 y 3 céntimos por kilómetro para los vehículos ligeros y de entre 5 y 14 para los pesados. En el caso de coches y motos quedaría por debajo de los precios en vigor en países como Italia, Portugal o Francia y se alejaría de los 12 céntimos que de media cuestan ahora los peajes por kilómetro en las autopistas españolas.

Seopan considera como «muy baja» la tarifa de 1 céntimo por kilómetro, pero suficiente para renovar la red de autopistas, cuyo déficit cifra en 1.424 millones de euros, y mantener además todas las actuales concesiones, cuyo coste por kilómetro eleva a 60.000 euros al año. Con un peaje de 3 céntimo para coches y motos y de 14 para camiones y autobuses, las constructoras estiman que, además de atender al mantenimiento de las autopistas, se podría también conservar la red de autovías, cuyo coste cifra en 5.200 millones.

Salvo acuerdo con la concesionarias actuales, estos peajes podrían ser implantados en las autovías y en las autopistas en las que se agote su período concesional, pero las dos gallegas estatales son de las que más tarde verán desaparecer sus peajes, al ser dos de las tres únicas de España que tienen 75 años de explotación en manos privadas.

Con la propuesta de Seopan, viajar de A Coruña a Madrid en coche saldría en entre 5,91 y 17,73 euros y entre 29,55 y 82,74 les costaría a los camiones. Desde Vigo los peajes tendrían un importe similar, entre 5,89 y 17,67 euros para los ligeros y de 82,46 euros para los pesados. Pero hacerlo entre A Coruña y Lugo, ahora gratis, también pasaría a tener un coste en peajes de 2,85 para coches en el escenario más caro, y entre Vigo y Ourense sería de 2,79 euros, por poner dos ejemplos.

La patronal de las constructoras y concesionarias defiende su propuesta al asegurar que permitiría con los fondos generados mantener la red viaria, que requiere 40.000 millones de euros en 25 años, según sus estudios. Añade Seopan que los peajes generalizados se convertirían en fuente de ingresos para el Estado por pagos anticipados de las concesionarias, así como en vía de ingresos fiscales, que estiman entre 17.000 y 49.000 millones en un cuarto de siglo. Inciden las constructoras en que además se liberarían fondos para otros fines, como políticas sociales, apuntan. Y por último mantiene la patronal, en sintonía con el ministro de Fomento, que la aplicación de un modelo igual para todo el país eliminaría desequilibrios entre zonas con peajes y otras sin ellos.

Galicia es la tercera comunidad con más kilómetros de carreteras de peaje, y en tres años será la primera, cuando venzan diversas concesiones en Cataluña y la Comunidad Valenciana.

El PSdeG quiere que la Xunta asuma por 9 millones los peajes autonómicos entre A Coruña-Carballo y Vigo-Baiona

En pleno debate sobre el futuro de la AP-9 en Galicia y, de forma genérica, sobre el modelo de gestión de las vías de alta capacidad, el PSdeG ha incluido en sus enmiendas a los Orzamentos una en la que propone que la Xunta levante los peajes de las autopistas de titularidad autonómica, en concreto las que en el norte unen A Coruña y Carballo y en el sur Vigo y Baiona.

El coste rondaría los nueve millones de euros anuales, según anunció Xoaquín Fernández Leiceaga, quien destacó el efecto positivo que tendría esta supresión de barreras de pago en la movilidad de las dos áreas metropolitanas más importantes de Galicia. El portavoz socialista presentó la iniciativa dentro de una batería de medidas presupuestarias y fiscales que permitirían recaudar a la comunidad gallega alrededor de 400 millones de euros más, buscando otros enfoques al gasto que incidirían en las infraestructuras y en la ampliación de la gratuidad del transporte por carretera a los jóvenes a toda la red gallega y no solo al entorno de las ciudades, como ocurre ahora.

Leiceaga, preguntado al hilo de los peajes que sugiere Fomento para cubrir el mantenimiento de las vías, no aclaró cómo se sostendrían estos dos tramos en el futuro, pero consideró interesante analizar la posibilidad de crear un «fondo de solidariedade», estatal o autonómico, que permita rebajar los peajes en autopistas como la AP-9, que consideró como una «anomalía» dentro del panorama de las infraestructuras.

La AP-9, «negocio redondo»

Más contundente fue Ana Pontón (BNG), que calificó de «estafa» los peajes de la Autopista del Atlántico, «unha das máis caras de Europa». Para la líder nacionalista, sería un «negocio redondo para o noso país» la adquisición de esta infraestructura, que valoró en torno a los 1.400 millones de euros. Mientras esta operación no se aborde, insistió, harán falta rebajas y bonificaciones, una reivindicación que también hizo suya Luís Villares (En Marea). Sobre los peajes blandos para contribuir a la conservación viaria, Pontón cree que se convertirán en una discriminación entre los que pueden pagar y los que menos tienen, que deberán buscar alternativas más inseguras.

El portavoz del PPdeG expresó su escepticismo sobre la «reflexión» del Gobierno para financiar el mantenimiento viario, pero prefirió no profundizar en la cuestión hasta que hagan una propuesta «en serio». Pedro Puy cree que se trata de un «globo sonda» que da para una tertulia y que, a su entender, no debe esconder reivindicaciones concretas como el levantamiento del peaje de Redondela.