Las encuestas internas los sitúan como opciones más sólidas en A Coruña y Santiago
20 sep 2018 . Actualizado a las 05:00 h.Las encuestas internas que manejan los socialistas gallegos, dos en el caso de A Coruña y tres en Santiago, han contribuido a despejar el camino de este partido hacia las elecciones municipales de mayo. Todos estos estudios pulsan la opinión ciudadana en torno a varios perfiles políticos e hicieron aflorar sobre todos los demás el nombre de Fernando González Laxe para dar la batalla por la alcaldía de María Pita y el de Xosé Sánchez Bugallo para competir por el bastón de mando en Raxoi, así que el PSOE está consumiendo ya las últimas bazas de que dispone para intentar convertir a ambos en candidatos. Es una labor que se hace con distinta intensidad, pues son dos perfiles muy diferentes y no suscitan el mismo grado de consenso.
No es la primera vez que el nombre de Fernando González Laxe, primer presidente socialista de la Xunta, que actualmente ocupa su plaza de miembro nato en el Consello Consultivo de Galicia, es puesto sobre el tapete como potencial candidato a la alcaldía coruñesa. Esta opción se manejó entre bambalinas en el 2015, si bien el líder del PSdeG de entonces, José Ramón Gómez Besteiro, se inhibió de este asunto con una convocatoria de primarias que dejó la elección en manos de los militantes.
Pero el fiasco electoral del 2015, año en que los socialistas acabaron convertidos en tercera fuerza, acabó metiendo de nuevo la bola numerada de Laxe en el bombo de las candidatura. El expresidente de la Xunta es una persona venerada y reivindicada en su partido, así que su nombre concita un amplísimo consenso en la organización, a nivel tanto local como provincial y autonómico.
Si Laxe accediera a dar el paso, es muy posible que todos acabaran abriéndole pasillo y se implicaran en su proyecto, pues las encuestas antes citadas señalan que pondría al PSOE en disposición de competir por ser la fuerza más votada. El problema es que Laxe se muestra reticente. Y aunque aceptó algún encargo para regresar a la política, como cuando José Blanco lo puso al frente de Puertos del Estado entre el 2009 y el 2012, lo cierto es que Laxe sigue resistiéndose a la tentación de María Pita, y falta por ver si el PSOE acabará activando el comodín de la llamada del equipo de Pedro Sánchez, algo que podría ser determinante.
La situación en Santiago es más compleja, pues la agrupación local todavía sigue pagando el enorme desgarro provocado con las primarias del 2014, en las que Paco Reyes se impuso a Mercedes Rosón entre acusaciones mutuas de adulteración del censo de militantes. La fractura interna hizo migrar a muchos electores de un PSdeG que, al igual que ocurrió en A Coruña y Ferrol, retrocedió a la tercera posición política.
Ese contexto de fondo, revalorizó el nombre del último alcalde socialista, Sánchez Bugallo, pues en el partido creen que la gestión municipal que vino después con el PP y Compostela Aberta fue peor. Las encuestas internas apuntan que Bugallo sería el candidato con mayor penetración social y el único con el que el PSOE estaría en disposición de competir por la alcaldía tête à tête con Martiño Noriega.
Bugallo es promovido por varios sectores de la agrupación local y defendido por Xoaquín Fernández Leiceaga, presidente del PSdeG y portavoz parlamentario. Aun así, en torno a Bugallo no hay un consenso cerrado, pues el sector que apoya a Gonzalo Caballero en Santiago quiero retirarlo de escena.
El partido aún se resiste a deshojar la margarita en cinco de las siete ciudades gallegas
El PP gallego está proclamando estos días a los candidatos que lanzará a competir por las alcaldías de las siete ciudades de la comunidad. El BNG ya los tiene elegidos a todos y las marcas afines a En Marea parece fuera de toda duda que volverán a apostar por quienes lograron tocar poder municipal en el 2015. Pero en el PSdeG-PSOE las cosas están más verdes, pues el partido todavía se resiste a deshojar la margarita de su cartel electoral en cinco de las siete ciudades, es decir, todas menos Vigo y Lugo, donde ostenta la alcaldía.
Ahora que el PSOE logró acceder al Gobierno de España y que intenta impulsar algunas apuestas sólidas para recuperar espacio e intentar convertirse en la primera fuerza política, como vaticinan algunos sondeos, en Galicia no se ha establecido un calendario preciso ni un método de trabajo para abordar este trabajo.
Desde el entorno del secretario general del PSdeG, Gonzalo Caballero, hay dirigentes de peso que plantean que el partido debe apostar por los afines a la dirección, como por ejemplo Beatriz Sestayo o quien ella proponga en Ferrol, aunque no sea la apuesta que asegure el mejor resultado. Eso colocaría al partido en la foto del 2015, de verse relegado a la tercera plaza política.
Es más, en círculos del partido cunde ya el temor de que Gonzalo Caballero haga lo mismo que Besteiro y se inhiba del proceso de elección de candidatos, traspasando toda la responsabilidad a los militantes en las primarias.