Un enjambre de velutinas ataca a seis bañistas en una playa de Poio

Alfredo López Penide
López Penide PONTEVEDRA / LA VOZ

GALICIA

Ramón Leiro

El incidente se produjo cuando la rama que sostenía el nido se fracturó por el peso

14 jul 2017 . Actualizado a las 18:36 h.

Los bañistas que ayer disfrutaban del buen tiempo en la playa de Chancelas, en el municipio pontevedrés de Poio, se vieron sorprendidos por el furibundo ataque de un enjambre de avispas velutinas. Ocurrió a media tarde, sobre las 15.30 horas, cuando la rama del árbol que sostenía el nido se quebró, presumiblemente por el incremento de peso y volumen que había alcanzado en los últimos días, hasta provocar que el nido se precipitara al suelo rompiéndose.

De inmediato, las avispas comenzaron a atacar a los bañistas más cercanos, mientras otros huían o buscaban refugio. Fueron instantes de angustia para muchos de los usuarios de este popular arenal de Combarro, mientras se avisaba a los servicios de emergencias.

Hasta seis personas tuvieron que ser atendidas sobre la arena por distintas picaduras. No obstante, en el caso concreto de uno de los afectados, el 061 decidió trasladarlo en ambulancia hasta el punto de atención continuada (PAC) de A Parda, en Pontevedra, que dispone de servicio de urgencias. Según relataron distintas fuentes, se empezó a quejar de un fuerte dolor de cabeza, por lo que se optó por derivarlo al centro de salud en previsión de que pudiese tratarse de algún tipo de reacción alérgica a las picaduras.

Mientras los servicios sanitarios atendían a los bañistas, la Policía Local y los voluntarios de Protección Civil procedieron a evacuar prácticamente la mitad de la playa por seguridad, al tiempo que se balizaba todo el entorno. Y es que, a apenas una decena de metros de donde se encontraba el nido que ayer provocó escenas de tensión en Chancelas, se descubrió un segundo nido también de grandes dimensiones. Los servicios de emergencias decidieron esperar a que anocheciera para aplicar el protocolo previsto en este tipo de situaciones y, de este modo, proceder a su eliminación.

Se da la circunstancia de que ambos nidos ya estaban localizados y, de hecho, se había informado de su presencia al 012, servicio que dio cuenta a Protección Civil. La mala suerte hizo que uno cayera al suelo y se rompiera antes de que pudieran intervenir para eliminarlo.

Este mes de julio está siendo especialmente complicado en Poio, ya que en apenas diez días se tuvo conocimiento de 24 avisos por la presencia de enjambres de avispas asiáticas.

Protección Civil alertó de una situación inasumible un día antes del ataque

Veinticuatro horas antes del incidente de ayer en la playa de Chancelas, Protección Civil de Poio alertó a través de Facebook de que «este problema está tomando unas trazas muy malas por la cantidad de nidos que están apareciendo». De hecho, no dudaron en señalar que la situación de Poio es «algo prácticamente inasumible con los medios del Concello y los voluntarios de la agrupación, que son los que proceden a la retirada o inutilización de nidos».

«Si la Administración autonómica no pone más medios, tanto en ayuda a los Concellos pequeños como en investigación, esto se nos va de las manos», advertían. Aludían además al nido localizado en Chancelas, lamentando que tenga que ser el gobierno local el que «costee una empresa privada, cuando este Concello se adhirió al programa de la avispa para colaborar, ante la tardanza demostrada en el año 2016 por la empresa contratada por la Xunta».