Tres personas se quitaron la vida en los últimos años y hubo varios intentos más
07 jun 2017 . Actualizado a las 05:00 h.Unas vallas metálicas de dos metros y medio de altura impedirán que las personas puedan saltar a la autopista AG-57 desde el puente de Baredo. El paso elevado de la carretera provincial EP 2202 salva un desnivel de más de 40 metros de altura sobre la doble calzada y en los últimos años tres personas eligieron este punto para acabar con sus vidas.
La última persona que se suicidó fue el pasado 30 de marzo. Una joven de Gondomar saltó al vacío desde este lugar y falleció en el acto. Los sanitarios que acudieron al lugar no pudieron hacer nada por salvarle la vida puesto que a esa altura el impacto contra el suelo de asfalto es tan fuerte que las posibilidades de sobrevivir son nulas.
Una semana después otra vecina de la zona volvió a intentarlo, pero afortunadamente un familiar la pudo retener y avisar a una ambulancia. Tras estos acontecimientos, el Concello de Baiona transmitió a la Diputación de Pontevedra su preocupación por el peligro que representaba la falta de protección del puente. Este tramo de la carretera tiene un muro de protección de poco más de un metro de altura y una barandilla metálica. Fueron colocadas como medida de seguridad para evitar caídas accidentales de vehículos o peatones, pero cualquier persona puede rebasar esta barrera si se lo propone y caer abajo.
La petición para colocar las vallas se basó en un informe que elaboró la Policía Local con la recomendación de tomar medidas para evitar que vuelvan a producirse este tipo de incidentes. Operarios de una empresa especializada comenzaron ayer la colocación de estas protecciones de rejilla metálica que van fijadas sobre hormigón. Están diseñadas de forma que no se pueda escalar por las mismas. Así se intenta proteger la vida no solo de los suicidas, sino también de los usuarios de la autopista, que también podrían correr peligro si por error alguien decide saltar sin saber que hay un vacío al otro lado.
Zona transitada
El puente de la carretera provincial que cruza la autopista en Baredo se encuentra medio kilómetro después del monumento de la Virgen de la Roca en dirección al barrio de Fontes y al área recreativa de Chan da Lagoa. Suele ser transitada por vecinos que residen en la parte alta de Oia como Torroña o Burgueira, usuarios del campo de fútbol de Val de Martín y es un acceso entre las parroquias de Baíña y Baredo.
El gran desnivel existente en este tramo fue producto del desmonte que se realizó a raíz de la construcción de la salida de Baredo de la autopista de O Val Miñor, inaugurada en 1999, que conecta con la AP-9. En lugar de crear un túnel, se optó por abrir el monte de arriba a abajo creando un precipicio.