En Marea-Podemos, la trituradora del resto de la oposición

Domingos Sampedro
domingos sampedro SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

BENITO ORDOÑEZ

El grupo liderado por Iglesias convierte la moción de censura en un arma para ocupar el espacio del PSOE

30 abr 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

En Marea unió su destino al de Podemos en el derrotero que pueda tomar la moción de censura anunciada por Pablo Iglesias con el propósito no confeso de desgastar al resto de la oposición, porque sabido es que al PP de Rajoy no podrá desbancarlo. En esto, el grupo confederal actuó como un monolito. Luís Villares, líder de En Marea, se escudó en el hartazgo ciudadano con la corrupción para plegarse a la estrategia concebida desde Podemos con el fin de recuperar la iniciativa e intentar de nuevo ocupar el espacio político del PSOE, aprovechando que este partido está viviendo su momento más delicado.

Si algo enseña la política gallega es que las mociones de censura se sabe como empiezan, pero también los riesgos que pueden entrañar. En 1987 triunfó una que convirtió a Laxe en presidente de la Xunta, pero porque Ceferino Díaz cocinó previamente los apoyos necesarios, un paso indispensable que se saltó Podemos.

Xosé Manuel Beiras promovió otra al frente del BNG, en el año 2001, con el único afán de reprobar a Fraga por la crisis de las «vacas locas». No logró el apoyo de nadie y expuso a los nacionalistas a un desgaste innecesario que, a partir de entonces, empezaron a pagarlo en las urnas, hasta el punto de que el propio Beiras fue relevado al año siguiente como líder del Bloque. Todavía hubo dos mociones de censura más a nivel gallego, promovidas al alimón por Touriño y Beiras tras el naufragio del Prestige, que contribuyeron a abrir grietas en la mayoría del PPdeG.

La brecha en la oposición

La iniciativa que prepara Podemos a la que más se parece, salvando todas las distancias, es a la de Beiras del año 2001. Porque nace de forma unilateral, sin tanteo previo con otras fuerzas, y no tiene capacidad de generar un cambio de Gobierno. Más que el PP, quien puede salir desgastado de esta debate es la propia oposición, dada la profunda división que exhibirá en el debate, toda vez que el PSOE, Ciudadanos y PNV advirtieron que no la secundarán, mientras los nacionalistas catalanes condicionan su voto a que no haya trabas al referendo independentista.

El tiempo dirá si la censura se vuelve en contra de su promotor, Pablo Iglesias, pero mientras tanto tiene una virtud nada despreciable para Podemos, al permitirles retomar la iniciativa política y desviar la atención de sus problemas internos, en un momento en que cuando salían solo salían por sus cuitas de partido.

Es innegable que Pablo Iglesias parece desenvolverse mucho mejor en el terreno de la política del gesto y del artificio que en la dinámica marcada por unas instituciones. De hecho, para el líder de Podemos las instituciones pueden llegar a ser «trituradoras de la decencia», como dijo en vísperas de la asamblea de Vistalegre II para propugnar una mayor radicalización y la vuelta al combate en la calle.

Pero hay algo que permite la moción de censura sobre todas las cosas, y en eso el interés de Podemos es coincidente con el de En Marea, que es desgastar al resto de la oposición, especialmente al PSOE. Lo dijo Susana Díaz en los actos en los que participó en los últimos dos días en Galicia: «Quieren interferir en el proceso interno del PSOE», repartiendo carnés de buenos y malos, de supuestos amigos y enemigos del PP, para agravar la brecha entre las familias socialistas. Hace tiempo que Pablo Iglesias elaboró un manual para convertirse en el líder indiscutible de la oposición política en España para combatir desde esa posición a un PP cercado por la corrupción mientras aguarda a que el poder le caiga como un fruto maduro en los brazos. Fracasó dos veces en el intento. Ni en las generales del 20D ni en las del 26J del 2016 logró Podemos superar a un PSOE que dieron por desahuciado antes de tiempo. A falta de nuevas elecciones, la moción de censura es una nueva oportunidad para cumplir con el manual de triturar al resto de la oposición.