EU vuelve a tensar En Marea: «Avanza nun terreo contrario ao seu espírito constituínte»

Susana Luaña Louzao
susana luaña SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

Sandra Alonso

La ejecutiva lamenta que las fuerzas que crearon el partido queden «excluídas do propio proceso»

26 abr 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Esquerda Unida celebrará el próximo 3 de junio su duodécima asamblea nacional, en la que, además de renovar los cargos de la coordinadora, hará balance del camino emprendido hace cinco años, cuando se puso en marcha la «unidade popular» en Galicia, primero a través de Alternativa Galega de Esquerda y ahora con la creación de En Marea. Pero a tenor de los documentos elaborados para esa cita y que Esquerda Unida ya ha dado a conocer en su página web, el sentir de la federación es más bien pesimista, al menos en lo que se refiere al camino emprendido por En Marea.

La coordinadora de EU, Yolanda Díaz, en su informe de gestión, que hace las veces de documento de despedida ya que ese día dejará el cargo que ocupa desde hace doce años, se muestra crítica con el proceso: «A nosa En Marea avanza nun terreo contrario ao seu espírito constituínte, do cal nos reivindicamos. É dicir, queremos unha En Marea participada, horizontal, plenamente democrática, rupturista, plural e con liderados compartidos. En todo caso, nós non coprotagonizamos o percorrido desde AGE ata hoxe para reconfigurar un espazo nacionalista 2.0. Nacemos para derrubar fronteiras entre a esquerda, non para levantar novos muros que non conducen senón a nada».

En otro documento que lleva por título Unha Esquerda Unida para unha unidade popular, la ejecutiva de EU lamenta que «organizacións e espazos políticos que pulamos dende o inicio para o artellamento de En Marea e defendemos a fraternidade e a democracia interna na toma de decisións, somos os que ficamos máis excluídos do propio proceso».

Pero como ya pasó con Anova, la batalla política se planteará dentro de la propia En Marea, con la vista puesta en el plenario del partido que se celebrará en el mes de julio: «Non está en cuestión a necesidade de confluencia en si, senón este camiño tomado, do que se conclúe a necesidade de retomalo para corrixir os elementos antes sinalados».

Un paso atrás un mes después que Beiras, con quien creó AGE

No se puede decir que abandone la primera línea política, porque Yolanda Díaz (Fene, 1971) es todavía muy joven como para interpretar su cese como coordinadora de Esquerda Unida en clave de despedida. De momento, seguirá como diputada de En Marea en el Congreso de los Diputados, pero en junio deberá dejar de liderar la federación gallega de izquierdas, ya que los estatutos le impiden renovar el cargo y, además, se respira en la formación aires de cambio que podrían dejar el relevo en manos de Eva Solla, la vicepresidenta segunda del Parlamento de Galicia, que en el 2014, con solo 31 años, asumía la secretaría del Partido Comunista de Galicia. Pero es cierto que, tras doce años al frente de EU, Díaz cierra un ciclo en la política gallega que se abrió en el 2012, cuando, codo a codo con Beiras, puso en marcha el proceso de unidad popular que años después desembocó en En Marea.

Beiras, que ya había dejado el BNG desencantado y había fundado Anova, coincidía con Yolanda Díaz en la necesidad de explorar espacios de izquierdas más allá del nacionalismo, de ahí que juntos derribasen barreras históricas y pusieran en marcha Alternativa Galega de Esquerda, un experimento al que se sumó Equo y que duró lo que duró, porque no tardaron en descolgarse de Anova los críticos de Cerna.

Lejos de arrugarse, el proceso de «unidade popular» siguió su curso con las mareas locales y la posterior creación de En Marea. Fue entonces, cuando se buscaba un candidato a la Xunta, cuando el idilio entre Beiras y Díaz se rompió hasta tal punto que el histórico nacionalista llegó a calificar el comportamiento de la líder de EU de «ingrato» y «desleal». A partir de ese momento, Beiras fue dando pasos atrás en política que culminaron el mes pasado con su cese como portavoz de Anova. Ahora es ella quien deja el cargo de EU. Lejos quedan los días de vino y rosas.