La valedora do pobo constata un aumento significativo de las quejas contra la banca por la vivienda

GALICIA

El presidente del Parlamento y la Valedora do Pobo
El presidente del Parlamento y la Valedora do Pobo SANDRA ALONSO

El número de actuaciones de la oficina de la oficina de la defensora fue de 75.780 en el 2016, un 62 % más que en el año precedente

27 mar 2017 . Actualizado a las 16:59 h.

La valedora do pobo, Milagros Otero, presentó este lunes el informe de su oficina relativo al año 2016, en el que se constata un «aumento significativo», dijo, de las quejas y actuaciones contra las entidades financieros con asuntos relacionados con la vivienda, las hipotecas o la cesión de créditos a los llamados fondos buitre.

Precisamente en relación a este último apartado, la cesión de créditos a fondos buitre, la defensora de los gallegos inició hasta once procedimientos de oficio con mediación ante varios entidades financieras con el fin de hacer valer los derechos e intereses de los particulares. «Nos somos quen de fiscalizar ás entidades financeiras», admitió Milagros Otero, para dejar claro que su oficina no tiene ningún tipo de capacidad de control, más allá de la persuasión, ante los bancos. No obstante, dijo que se resolvieron casi todos los problemas en los que fue requerida su actuación, a la vez que varias entidades se comprometieran a no hacer lanzamientos de ejecuciones hipotecarias por falta de pago.

En la oficina del Valedor do Pobo se registraron el año pasado un total de 75.780 actuaciones, incluyendo quejas y consultas telefónicas, lo que significa un 62 % más que en el 2016. El número de asuntos investigados es notablemente más bajo, 2.356, ya que hubo varias quejas colectivas sobre un mismo problema, como el traslado de los trabajadores de los servicios telefónicos del 112 y el 061 de Santiago a localidad A Estrada.

Entre los asuntos que más preocupan a los ciudadanos están las políticas de las corporaciones locales, relacionadas con el empleo público y el urbanismo, así como las cuestiones vinculadas a la sanidad y a las listas de espera hospitalarias.