El número de personas que viven solas crece en Galicia al ritmo de 20 diarias

Carlos Punzón
Carlos Punzón VIGO / LA VOZ

GALICIA

Unas 266.100 viviendas de la comunidad ya cuentan únicamente con un residente

09 mar 2017 . Actualizado a las 07:24 h.

El hogar más común de los que existen en Galicia ya es de manera destacada el que forman las personas que viven sin compañía. Hay 266.100, mientras que el segundo caso más frecuente suma 234.000, y son los creados por las parejas sin hijos que conviven en el hogar.

La proliferación de viviendas ocupadas por un único morador crece a tal ritmo que cada día se generan en Galicia 20, según la radiografía familiar que el Instituto Nacional de Estadística ha confeccionado con datos a 1 de enero del 2016. A lo largo de todo el 2015 surgieron en la comunidad 7.100 hogares unipersonales. No hubo otro tipo de composición familiar que se incrementase más: las parejas con un hijo aumentaron en 6.600, en 3.500 las viviendas con tres o más descendientes o en 2.500 los hogares monoparentales.

Con las últimas cifras, uno de cada cuatro hogares de los 1,08 millones existentes en Galicia está formado por una sola persona, y en ellos vive prácticamente el diez por ciento de la población.

Mientras durante el 2014 la generación de nuevos hogares unipersonales estuvo protagonizada de manera mayoritaria por los que pasaron a quedarse viudos (se generaron así 10.900 núcleos de un integrante), en el 2015 estos disminuyeron en 9.600. El crecimiento estuvo motivado en el último año por un aumento de los divorcios. Se crearon por ese tipo de ruptura matrimonial 9.000 y a ellos se añadieron 7.100 más causados por la separación de parejas.

Menos solteros solos

La emancipación de jóvenes evolucionó a la baja, o al menos el número de hogares de solteros que viven solos, ya que disminuyeron en cuatrocientos casos. Destaca sin embargo el repunte que se ha producido en Galicia en el número de viviendas ocupadas por una sola persona cuyo estado civil es el de casado, tal y como apunta el INE. Hay en total 15.300 casos, provocados en su mayoría por situaciones laborales que obligan a algún miembro de la pareja a pasar la mayor parte del año fuera del domicilio familiar.

El sexo de las personas que viven solas es prácticamente igual al de la composición poblacional de Galicia, con un 52,3 % de viviendas con una mujer como única ocupante.

Por edades, de los 266.100 hogares unipersonales, los mayores de 65 años ocupan 121.600, siendo por tanto mayoría los casos de personas en edad laboralmente activa.

Amplio espacio

Los que viven solos lo hacen en viviendas de entre tres y seis habitaciones, fruto en la mayoría de las situaciones de haber evolucionado la composición del hogar de un núcleo familiar de pareja con hijos a un único integrante por la emancipación de los descendientes, o el fallecimiento de uno de los progenitores, o la ruptura matrimonial. Hasta en 222.700 casos las viviendas de un único ocupante tienen al menos tres habitaciones, pero por encima de seis hay incluso 36.900 hogares, mientras que solo 6.500 cuentan con menos de tres estancias. La superficie más común es la que abarca entre 46 y 75 metros cuadrados.

Hasta un 60 % de los hogares unipersonales están formados en viviendas ya pagadas íntegramente o heredadas y sin cargas financieras. La segunda situación más común entre los que viven sin compañía es la de contar con pagos pendientes para zanjar la adquisición de su residencia, mientras que solo 37.700 personas han optado por el alquiler.

La mayor parte de los que no comparten vivienda con nadie residen en Vigo, A Coruña, Santiago u Ourense, que suman 72.800 residentes de hogares unipersonales, cifra solo algo superior a la de los que viven solos en municipios de menos de 10.000 vecinos.

Quinientos dispositivos de teleasistencia están sin uso

La industria del mayor es y será aún más un sector en alza en Galicia. El imparable envejecimiento de la población y el aumento de hogares individuales genera necesidades específicas y de incremento imparable como ocurre en el caso de las residencias, atención domiciliaria, centros de día, ascensores, adaptación de baños o teleasistencia. Estar comunicado de manera permanente cuenta con varias opciones en Galicia, que incluso pueden resultar gratuitas en función de la renta y si se solicita a la Xunta.

teleasistencia

Alerta en caso de urgencia. La Xunta cuenta con 5.760 dispositivos que alertan a la Cruz Roja en caso de que el titular lo pulse en cualquier momento. Consiste en un dispositivo que se puede llevar colgado al cuello o en la muñeca y usar incluso en la ducha, y se activa al pulsar su único botón. La Cruz Roja llama al domicilio del titular para comprobar qué le ocurre y a los teléfonos de familiares o contactos facilitados como alerta. Genera el desplazamiento de especialistas sanitarios y de urgencia en caso necesario o llamadas de seguimiento para ofrecer seguridad.

Monitorización

Sensores en casa. Una segunda opción de teleasistencia consiste en colocar sensores inalámbricos en diversos puntos de la casa, como la habitación, la nevera o el salón, que emiten señales continuas de movimiento a la central y activan la alerta si se dejan de producir, poniendo en marcha servicios de emergencia y aviso a familiares.

Geolocalizadores

Por GPS. Ideados para personas con dependencia, con alzhéimer o deterioro cognitivo susceptibles de desorientación o caídas. Se coloca en el cinturón y cada cinco minutos emite una señal de localización de su portador.

Cuánto cuestan

Público y privado. La Xunta los ofrece gratis para rentas inferiores a 399 euros. Para el resto el coste es de 5 euros al mes, precio que rige en todos los casos para los geolocalizadores. Cruz Roja, que presta dichos servicios en los dispositivos que ofrece la Xunta, lleva a cabo los mismos trabajos de teleasistencia de manera privada por 25 euros al mes.

Hay aparatos suficientes

Reservas. Hay 4.625 personas que utilizan el sistema de teleasistencia básica que ofrece la Xunta y otros 343 el de sensores en domicilio. Hay 552 dispositivos en manos de la Administración autonómica sin uso en la actualidad, cifra que hace un año llegaba a 750. La Cruz Roja atiende a 10.089 usuarios, contando los propios, los de la Xunta y varios concellos. Otras 200 son seguidas permanentemente por los geolocalizadores y hay 40 aparatos más disponibles. Seguros y bancos ofrecen servicios similares.