Feijoo veta la tasa que el alcalde de Santiago pretendía imponer a los turistas

«Con toda a cordialidade», pero no va a poder ser. El presidente de la Xunta zanjó ayer el debate abierto desde el gobierno municipal de Santiago, que semanas atrás propuso cobrar una tasa turística para recaudar fondos que, según el alcalde compostelano, repercutirían en los servicios que se ofrecen a los visitantes y a la promoción de la ciudad. Ni Alberto Núñez Feijoo ni Martiño Noriega modificaron sus posturas, pero el segundo tuvo que claudicar ante a una realidad, y es que la competencia en esa materia está en manos de la Administración autonómica. Y San Caetano dijo no, «porque a pesar das cifras históricas do 2016, en España entran 78 millóns de estranxeiros, e a Galicia só veñen 1,3. Esa taxa -explicó Feijoo sin la menor tensión- non trae turismo, máis ben o contrario. Cando veñan dez millóns poderiamos plantexalo», resolvió. Además, el jefe del Ejecutivo advirtió también de dos errores en torno a la propuesta: plantearla para toda Galicia, como ocurre en Cataluña, no interesa a la mayoría de los destinos gallegos, y dejar aislado a Santiago entre municipios limítrofes que no la cobrarían podría provocar distorsiones de mercado.

Noriega aceptó con el mismo buen talante la decisión autonómica, pero expresó de todas formas su satisfacción por haber tenido la oportunidad de debatir este asunto con Feijoo y exponerle su modelo turístico de la ciudad para el 2021, el próximo año santo, que sirvió de horizonte para otras cuestiones analizadas en un encuentro enmarcado en la ronda de contactos con los alcaldes de las ciudades y los presidentes de las diputaciones.

---

---

---