«Es una tristeza que alguien pueda perder la vida porque otro en la carretera no esté en condiciones»
GALICIA
«El pisotécnico debe ser un reflejo fiel de las condiciones psicofísicas de la persona», dice José Luis Quintela, que hace un mes se cruzó con un conductor en contradirección
23 feb 2017 . Actualizado a las 05:00 h.Ocurrió el último fin de semana de enero. José Luis Quintela circulaba por la autopista AP-9 a la altura de Pontedeume cuando se dio cuenta de que unas luces que veía al frente eran de un coche que se acercaba a él en contradirección. Junto a Quintela viajaban otras tres personas que apenas se dieron cuenta de lo que sucedía. «Es algo muy rápido y tampoco da tiempo a pensar mucho, pero realmente me quedé asombrado, sorprendido y preocupado», relataba horas después del incidente a Álvaro Alonso, de la delegación de La Voz en Ferrol.
Tres semanas después de aquello, el coruñés José Luis Quintela está más tranquilo pero sigue igual de preocupado. Su trabajo en Santiago lo obliga a viajar constantemente utilizando la autopista, cada jornada más de 150 kilómetros, así que tener miedo a circular por esta vía no es una opción viable para él. «Estoy bien, pero sí me preocupa que haya casos», decía ayer. Aquel día, un hombre de avanzada edad creyó que se había confundido y decidió dar media vuelta en plena autopista. Hasta que fue interceptado por la Guardia Civil recorrió diez kilómetros.
Tras haberse cruzado con este conductor despistado, Quintela prefiere no opinar sobre si los psicotécnicos deben o no tener acceso a los datos médicos de una persona, pero sí tiene claro que «es importante que lo que se haga se haga de verdad», e incluso que se endurezcan las condiciones. Se refiere a las revisiones por las que tienen que pasar los conductores, y en este sentido insiste en que «el psicotécnico debe ser un reflejo fiel de las condiciones psicofísicas de la persona». Del mismo modo que la inspección técnica de vehículos (ITV) debe ser fiel reflejo del estado del automóvil, apunta.
Tras el susto que pasó en plena autopista, Quintela prefiere calificar ese episodio como «un accidente aislado». Sin embargo, sabe que en otros casos no ha sido así, y cree que eso es lo que hay que tratar de evitar. «Casos como el de Aranga, en el que hubo una muerte. Es una tristeza que porque otro vaya bebido o drogado o no tenga las condiciones psicofísicas alguien pueda perder la vida».