Un protocolo contra los «kamikazes»

Maite Rodríguez Vázquez
MAITE RODRÍGUEZ OURENSE / LA VOZ

GALICIA

DANIEL PORTELA / IAGO GARCÍA

La Guardia Civil de Tráfico explica cómo se detecta y retira a un conductor que circule por un carril del sentido opuesto

23 feb 2017 . Actualizado a las 12:34 h.

La presencia de un conductor que circula en contradirección en carreteras desdobladas como las autovías no es muy frecuente, pero se dan casos, como el que ocurrió el pasado sábado en la A-52 cuando un piloto octogenario condujo más de cuarenta kilómetros en sentido inverso, poniéndose a sí mismo y a los demás conductores en peligro. Se reserva el calificativo de kamikaze para aquellos que se adentran de forma consciente en sentido contrario. No fue el caso de este octogenario, quien no obstante ha perdido su permiso de conducir. Para recuperarlo, tendrá que someterse a un examen médico en la delegación de Sanidade.

En este caso, la Guardia Civil lo localizó y lo retiró de la circulación antes de que provocase ningún accidente. El teniente Juan Carlos Nogueiras, del destacamento de Verín del subsector de Tráfico de Ourense, explica cómo actúan cuando se detecta a un conductor de este tipo. «La primera etapa es la detección, bien sea a través de las cámaras de la DGT o porque lo avista una patrulla o un usuario. Aquí es importante la colaboración ciudadana, una vez que los conductores hayan sobrepasado el vehículo y eviten la colisión, deben ponerse en contacto con la Guardia Civil». El teniente indica que cuanta más información aporten, mejor: el punto kilométrico en el que se cruzaron, si llevaba las luces encendidas o la velocidad a la que creen que iba.

Una vez confirmado el lugar por el que puede estar circulando el conductor en contradirección, el siguiente paso es hacerle un seguimiento, en el que participan las patrullas de Tráfico y las de Seguridad Ciudadana de la Guardia Civil. El teniente explica que se activan los paneles alfanuméricos para advertir del peligro del vehículo en sentido contrario al resto de conductores. «Los agentes de la autoridad también pueden detener la circulación haciendo un tapón», explica Nogueiras, para cerrar al infractor. Una vez detenida la circulación, se le hace girar para ponerse en sentido correcto y se busca la primera salida. En casos en los que el piloto esté bajo los efectos del alcohol u otras sustancias, se inmoviliza el vehículo, precisa.