Las farmacias gallegas presentan un panorama diferente en lo que a la vacuna de la meningitis se refiere en función de la ubicación y el perfil de población de la zona
10 feb 2017 . Actualizado a las 05:00 h.De desabastecimiento absoluto y listas de espera que superan el centenar de personas, a una situación más o menos controlada. Las farmacias gallegas presentan un panorama diferente en lo que a la vacuna de la meningitis se refiere en función de la ubicación y el perfil de población de la zona. Eso sí, la mayoría confirma la escasez de unidades, que además se está agravando. Hay casos muy llamativos. En una de las farmacias de O Milladoiro, un núcleo limítrofe con Santiago y de alta población infantil, se enfrentan a semanas sin ninguna dosis, otras con dos y otras con tres. Y una lista de espera elevadísima. «Tenemos a gente apuntada desde octubre del 2015», apuntan. Prácticamente desde el inicio de la comercialización de Bexsero no han tenido una época buena para reducir la demanda, «y ahora nos mandan un comunicado con que va a haber más problemas de suministro», cuentan.
Lo mismo ocurre en A Coruña. En una botica de la plaza de Lugo dicen con sinceridad: «Ya ni apuntamos a la gente, para qué, ¿qué les vas a decir, que vengan en ocho meses?». Tienen más de cien dosis solicitadas y en este caso llevan dos o tres semanas sin que llegue a este establecimiento ni una sola vacuna.
En otra de las farmacias más conocidas del casco histórico compostelano son igual de claros, en todo lo que va de año recibieron catorce dosis. Tienen anotadas en lista de espera unas 150 dosis. Y eso que aseguran desde esta botica que la distribuidora suele esforzarse con los establecimientos que venden más, como es el caso. «Ya no se entiende lo que ocurre, lo normal son seis meses para poner una línea de producción a punto cuando se trata de un medicamento como una vacuna, pero llevamos año y medio. Imagino que se derivan lotes a otros países», apunta un profesional como una posible explicación al desabastecimiento.
La situación es dispar en las 1.350 farmacias que aproximadamente hay en la comunidad. En Ourense, por ejemplo, hay boticas que aseguran que prácticamente no tienen lista de espera, mientras que en otras de la misma capital ourensana admiten, como en las otras provincias, que las demoras son elevadas y las vacunas llegan cada vez con menor frecuencia.