Feijoo plantea cuatro puntos para negociar una posición de país en financiación autonómica

GALICIA

Sandra Alonso

Solo el PSdeG recoge el guante para llegar a algún entendimiento con el PP, mientras En Marea y BNG reclamar un modelo más asimétrico para Galicia

24 ene 2017 . Actualizado a las 12:49 h.

El buen regusto que le dejó a Alberto Núñez Feijoo la Conferencia de Presidentes celebrada la semana para empezar a discutir el nuevo modelo de financiación de las comunidades autónomas, presidió también este martes la comparecencia del presidente de la Xunta ante el Parlamento, realizada a petición de los grupos de la oposición, para dar cuenta de los asuntos tratados en dicho encuentro. El mandatario gallego confía en que la «vontade de acordo» que dijo apreciar en la reunión no fuera solo una pose, sino más bien un «punto de partida» para alcanzar un buen pacto, motivo por el cual tendió la mano a la oposición para llegar a un entendimiento en torno a cuatro puntos y poder así fijar una posición de país sobre la distribución de los recursos del Estado.

La financiación autonómica se ahora empezará a discutir ahora una comisión de expertos, en la que Galicia podrá designar una persona. Y en aras del consenso, Feijoo propuso un perfil de compromisol, motivo por el cual el conselleiro de Facenda abrirá consultas con las tres fuerzas de la oposición para llegar a un pacto.

El segundo punto de acuerdo ofertado es en materia de lucha contra el envejecimiento de la población, manteniendo abierta su oferta de que el En Marea, el PSdeG y el BNG designen miembros en el Observatorio Demográfico con el fin de sentar las bases para un pacto en materia de impulso demográfico. En tercer lugar, se comprometió a comparecer ante la Cámara cada vez que haya una Conferencia de Presidentes e informar a los grupos sobre los avances que se vayan produciendo, y todavía planteó Feijoo, en paralelo, un cuarto punto de acuerdo fijando una posición política conjunta en materia de lucha contra la violencia de género colgándose de una iniciativa que defenderá el BNG en el Parlamento, que sería un acuerdo que Galicia haría suyo después en la conferencia específica que sobre esta materia tendrá lugar en el Senado.

No obstante, los cuatro puntos colocados por Feijoo sobre la mesa para el acuerdo fueron acogidos con suma frialdad por parte de los grupos de la oposición. Solo el portavoz socialista, Xoaquín Fernández Leiceaga, se situó en las mismas coordenadas planteadas por el presidente gallego en algunos aspectos, si bien consideró que la Conferencia de Presidentes supuso «moito ruido e poucas noces». Y aunque consideró un buen comienzo que Feijoo plantee ahora varios pactos de país, dijo que la conformación de dicha posición tendría que venir avalada por documentos y diálogo previo en el que el PP no invirtió tiempo alguno. «Esta sería unha práctica convinte para establecer un consenso», esgrimió Leiceaga.

Los demás grupos no dieron opción alguna para el entendimiento. Ana Pontón, portavoz del BNG, renegó de que Galicia tenga que abordar una negociación multilateral a nivel de Estado. Calificó la Conferencia de Presidente de «bluf» y apostó por la una discusión bilateral con el Estado, al igual que el País Vasco y Cataluña, que llegue a un modelo más asimétrico que favorezca los intereses gallegos. En esta idea insistió también Luís Villares, portavoz de En Marea, que valoró que si Feijoo salió satisfecho de la reunión es «porque non levaba posición e valíalle todo o que alí se trataba».

Ante estas palabras, el mandatario autonómico constató en la réplica que comparte puntos de entendimiento con el PSOE, pero que está en las antípodas de la posición nacionalista defendida por el BNG y el En Marea. Y reprochó que los nacionalistas tienen un planteamiento «ben simpático» en esta cuestión, en la que «pola mañá se independizan de España e pola tarde piden créditos para chegar a fin de mes».