Arranca la negociación para adaptar y racionalizar el mapa de titulaciones

Lo anunciaron en noviembre y ayer arrancaron motores. Apenas 24 horas después de la presentación por parte del rector de A Coruña de su propuesta de nuevas titulaciones para avanzar en la especialización del campus de Ferrol, Xunta y universidades se han sentado a la mesa para arrancar las negociaciones del rediseño del mapa de titulaciones de la comunidad, un ambicioso proyecto cuyos frutos podrán verse en «breve», según afirmó el conselleiro, Román Rodríguez, en una entrevista en la Radio Galega, en la que reconoció que la expansión que se dio en su momento debe ahora ser ajustada y coordinada.

Ese en breve será, según parece, el próximo año. Porque de la primera toma de contacto de ayer ha salido el calendario de trabajo, que se extenderá a lo largo del 2017 y parte del 2018 en reuniones más o menos periódicas, aunque el ritmo que se ha marcado es bastante alto para abordar con celeridad este cambio, que podría ya estar implantado en el curso 2018-2019. ¿El objetivo? Que la enseñanza superior dé respuesta a las necesidades de Galicia a la vez que aumenta su vocación internacional y que esta nueva oferta sea capaz de limar las ineficiencias que existen, como puede ser la duplicidad de títulos.

Así que a partir de ahora habrá que analizar el encaje de nuevas carreras -como el grado en gestión industrial de moda que propone A Coruña para su campus de Ferrol o los grados en biotecnología y criminología que está interesada en implantar la USC- y también en qué medida los grados duplicados no son necesarios. Y habrá que ver también qué pasa con aquellas carreras cuya demanda es muy baja y tienen en marcha un plan de viabilidad. Algunas desaparecerán. Otras, sin embargo, se salvarán por su carácter singular, como Filoloxía Galega, por cuestiones obvias, o como Filosofía. A finales de este mismo mes las universidades deben entregar sus informes de seguimiento de estos planes de viabilidad. Será la Axencia para a Calidade do Sistema Universitario la encargada de analizar esa evolución y emitir un informe.

Porque el calendario de reuniones que ahora se inicia es la culminación de un proceso que lleva en marcha varios años y que ha llevado a una continua transformación en la oferta universitaria en Galicia. Han desaparecido másteres que han dejado paso a otros nuevos. Se han fusionado titulaciones y se han creado grados simultáneos. Y también se han puesto en marcha nuevas modalidades de estudio, como los grados semipresenciales.

El calendario que acordaron ayer la Xunta y los vicerrectores de las tres universidades servirá también para discutir y poner sobre el papel el marco de referencia que debería guiar la implantación de nuevos estudios en las universidades gallegas. La base ya está puesta. Es la especialización de campus en la que en los últimos años han ido trabajando las universidades. Vigo tiene un Campus do Mar, uno centrado en las artes, la comunicación y la cultura (Campus Crea, Pontevedra) y otro orientado a la formación e investigación en gestión y aprovechamiento de recursos hídricos en Ourense. A Coruña ha apostado por que Ferrol sea un polo en lo que a industria se refiere y Santiago se ha centrado en las ciencias de la vida (Campus Vida) y Lugo en las del territorio (Campus Terra). Además, hace escasas semanas presentó al público el Campus da Cidadanía, que aglutina las titulaciones de ciencias sociales y humanidades.

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