Galicia gestiona 60 millones de recetas al año desde el copago

e. álvarez / s. carreira SANTIAGO, REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

La farmacia en Galicia
La Voz

La factura, similar a la del 2003 por la aportación de los usuarios

12 ene 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Los gallegos recogen en la farmacia unos sesenta millones de recetas de medicamentos incluidos en el catálogo del Sistema Nacional de Salud, una cifra esta que parece difícil reducir, ya que es prácticamente la misma desde el 2012. Pero hasta entonces, hasta que se aplicó el  copago en las prescripciones para los jubilados y pensionistas -antes, estos tenían los medicamentos gratis- el consumo de fármacos emitidos por los médicos de la Seguridad Social no hacía más que aumentar desde el 2003 al vertiginoso ritmo de casi tres millones por año. Sí es cierto que en el 2010 se notó la crisis también en las boticas, ya que el crecimiento se hizo más pausado: en el 2011 solo aumentó en poco más de un millón el número de recetas, ya que estas incluyen no solo las de los pensionistas, sino también las de usuarios en activo, que por aquel entonces pagaban un 40 % aunque estuviesen en el paro.

El envejecimiento poblacional explica que del 2003 hasta aquí haya crecido nada menos que en doce millones el número de recetas, un 21 % en valores relativos, a pesar de la crisis, el copago y, lo que es más importante, el medicamentazo -que entró en vigor el 1 de agosto del 2012 y sacó de la cartera de fármacos subvencionados unas 400 medicinas-. Galicia es una comunidad abocada a un gasto mayor en farmacia, así como en asuntos relacionados con la dependencia. Y de hecho se gasta más, casi veinte millones de euros en todo este tiempo, desde los 656 del 2003 a los 674 del 2015; esto supone casi un 3 % más en la factura de la botica.

Fármacos más baratos

La diferencia entre un crecimiento (21 % más de recetas) y otro (3 % más en la factura) se entiende por la participación del pensionista en el precio y porque ha bajado el valor de cada receta. Hace 13 años, el coste medio de cada visita al médico superaba los 14 euros para el usuario en Galicia; hoy ni siquiera llega a los 11. Es decir, se consumen medicamentos más baratos.

En cuanto a la cantidad por usuario, no todo el mundo coincide en que la gente compre medicinas sin ton ni son. El presidente de la Asociación Galega de Medicina Familiar e Comunitaria, Jesús Sueiro, echaba por tierra ayer el mito del consumo excesivo de fármacos: «No podemos decir eso desde la Seguridad Social porque nos estamos culpando a nosotros, que somos quienes los recetamos. Y en cuanto al abuso del sistema, creo que eso lo dice quien está fuera de la realidad, porque nadie va al médico por gusto, o va a la farmacia a comprar medicamentos sin motivo. Al contrario, a nosotros nos dicen muchos pacientes que no quieren tantas pastillas, que si les podemos quitar alguna», dice Sueiro.

¿Y en España? Sigue la misma tónica que Galicia. En el conjunto del territorio nacional el crecimiento en número de recetas es superior al que vivió Galicia desde el 2003, con casi un 25 % más de prescripciones oficiales, y el gasto también es mayor que en la comunidad, más de un 6% de aumento en este período. El montante de cada receta también bajó, unos 3 euros, como en Galicia.

Las cifras globales que se barajan son astronómicas: en el 2003 en España se expidieron 706 millones de recetas con un montante total de 8.941 millones de euros; trece años después fueron 882 millones de prescripciones públicas las que se gestionaron en las farmacias y le costaron al Estado 9.535 millones.