Prohibida la barra libre y la venta de entradas asociada a un número de copas

m. mosteiro / A. mahía REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

ÓSCAR CELA

Las fuerzas de seguridad reforzarán el control del acceso del alcohol a menores

31 dic 2016 . Actualizado a las 10:54 h.

Ni una sola gota de alcohol a menores de edad. Es casi imposible, pero es el objetivo que se han marcado las fuerzas de seguridad en Galicia, que reforzarán sus efectivos para controlar el acceso de los jóvenes que aún no hayan cumplido los 18 años a las fiestas de Fin de Año y evitar las intoxicaciones etílicas.

A los chicos no se les podrá vender entradas a fiestas donde se consuma alcohol, que en una noche como la de hoy son todos. Pero si los adolescentes son un foco de atención prioritario, algunas de las medidas que se han planteado para ellos dentro de la ley gallega de prevención del consumo de alcohol por menores también afectan a la población adulta y, especialmente, a los locales de copas que tengan pensado organizar celebraciones esta noche. La normativa prohíbe cualquier forma de promoción que induzca al consumo abusivo, lo que está especialmente vetado en el artículo 15.12, que incide sobre todo en aquellas promociones que propicien la ingesta de bebidas alcohólicas mediante una rebaja de los precios.

A efectos prácticos, la «barra libre está prohibida, ya que claramente induce al consumo abusivo y porque de ella se infiere la existencia de una rebaja en el precio de las consumiciones», según destacaron fuentes de la Consellería de Sanidade.

Y no solo eso, sino que en el caso de las fiestas, lo que es aplicable a las de Nochevieja, tampoco se permite «la compra de entradas asociadas a un número concreto de consumiciones si el precio de las mismas es inferior al habitual sin la promoción». Suele ocurrir que muchos establecimientos de ocio nocturno coincidiendo con esta fecha utilizan como gancho o bien la barra libre o la reducción del precio de las copas.

La normativa gallega también pone límites a estrategias de venta habituales como los descuentos 2 por 1 o las happy hour. Y la ley, según precisaron desde el departamento de la Xunta, «se aplica a toda la población», ya que lo que se pretende evitar es el consumo abusivo.

Piden el permiso paterno

Pero donde se pondrá mas el acento es en evitar que este tipo de prácticas alcancen a los menores, sobre todo después de que hace unas semanas la policía se encontrase en una discoteca de A Coruña con numerosos adolescentes bebiendo alcohol. Desde entonces aumentó la vigilancia, que se reforzará la próxima madrugada, lo que también ha puesto en alerta a los propios locales de ocio para extremar las medidas dirigidas a evitar que se cuelen los adolescentes en sus fiestas. De este modo, algunos establecimientos que ya vendieron entradas exigieron a los chicos un papel con el permiso paterno, a la vez que se les advirtió que, pese a pagar la entrada de barra libre, no les podrán servir alcohol. Si un menor es sorprendido bebiendo en un local, sus responsables se exponen a una multa de 3.000 euros.

Consumo abusivo

Prohibido su fomento

Cualquier forma de promoción que induzca al consumo abusivo de alcohol está expresamente prohibida en el artículo 15.12 de la ley gallega de prevención del alcohol a menores, aunque este principio es extensible a toda la población.

¿Y si la celebración se suspende con la entrada ya adquirida?

Van de gala. Ella con vestido y tacones y él con esmoquin. Y la entrada, pagada desde hace días. Directos hacia la fiesta. Pero el local está cerrado. No hay celebración, o porque no había sido autorizada o porque se ha sobrepasado el aforo. O lo que es peor, un desalojo abrupto por problemas administrativos o de seguridad. Son casos excepcionales, pero pueden ocurrir. ¿Qué se puede hacer? Reclamar y hacer valer los derechos del cliente para recuperar el dinero. Es lo que aconsejan las asociaciones de consumidores en sus recomendaciones específicas para Fin de Año. Para ello es imprescindible conservar la documentación, tanto la propia entrada como el justificante si se ha adquirido en Internet. Aunque lo preferible es comprar el pase en el momento de la fiesta. Y si se ha sobrepasado el aforo del local hay que llamar a la policía. Los consumidores también deberían comprobar que los locales cuentan con salidas de emergencia suficientes y utilizables, extintores o aseos en buenas condiciones. De lo contrario pueden denunciarlo.