Diana Quer, dos meses sin rastro y con muchas incógnitas

José Manuel Pan
j. m. pan REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

ATLAS

La joven madrileña desapareció el 22 de agosto en A Pobra. Desde entonces nada se sabe de ella

23 oct 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Sin rastro. Diana Quer desapareció hace dos meses, en la madrugada del lunes 22 de agosto cuando supuestamente regresaba a su casa de veraneo en A Pobra de Caramiñal. Ni su madre, Diana López-Pinel, ni su hermana Valeria la echaron en falta esa noche. Fue ya por la mañana de aquel lunes cuando su madre no la vio en su cama. Diana no había dormido allí. Las primeras horas fueron de incertidumbre y de llamadas para saber si la joven madrileña de 18 años y asidua de los veranos en Barbanza había pasado la noche en casa de alguna amiga. Fue la recomendación que le hizo el padre, Juan Carlos Quer, a Valeria cuando esta lo llamó por teléfono a Benicasim, donde se encontraba ese mes de agosto. Pero nadie la había visto.

La denuncia en el cuartel de la Guardia Civil presentada por la madre ese mismo lunes activó el dispositivo de búsqueda de personas. Desde el primer momento la desaparición fue considerada de alto riesgo, el mismo que se aplica en casos de menores. Era una desaparición sospechosa, sin motivo aparente. La Policía Judicial de la Guardia Civil de A Coruña, la misma unidad que investigó el caso Asunta, se puso en marcha. Con el apoyo de la UCO de Madrid se analizaron testimonios, imágenes, llamadas y mensajes telefónicos, posicionamientos de móviles. Se reconstruyeron las últimas horas de Diana en A Pobra, con quién estuvo, con quién se cruzó, quién la vio... Todo en busca de un rastro. Dos meses después de aquel 22 de agosto, la investigación continúa. Todo sigue abierto.