Muchas víctimas que se cambian de colegio para evitar el acoso vuelven a sufrirlo
21 sep 2016 . Actualizado a las 05:00 h.Se produce en clase. Suele consistir en insultos, amenazas, aislamiento y golpes y patadas. La edad media a la que se inicia está en los 12 años. Y trae como consecuencia problemas psicológicos en la víctima y el entorno, especialmente ansiedad y tristeza. Es, a vuelapluma, el resumen del calvario del acoso escolar. Y Galicia aporta el 2,9 % de los casos del total de España, según los datos presentados ayer por la Fundación Anar. En el caso del ciberacoso, los casos gallegos supusieron el 2,5 % del total nacional, mientras que el acoso de otro tipo, el que se suele llamar tradicional supuso el 3 %.
La víctima suele ser una chica en el caso del ciberacoso y un chico en el caso de otros tipos, de unos doce años. ¿Y el acosador? Se sienta en el pupitre de al lado, porque en un porcentaje muy alto de los casos son compañeros de clase que, además, actúan en grupos de entre dos y cinco personas. Si la víctima es una chica, las acosadoras suelen ser chicas, aunque también pueden ser grupos mixtos o incluso compuestos por hombres. Si la víctima es un chico, suele ser acosado por otros chicos. Es muy minoritario el caso de niñas acosando a niños. Además, por grupos de edad, es más habitual el acoso de un niño (asumiendo que niños son menores de 9 años) hacia otro, cosa que cambian en el caso de los adolescentes (entre 13 y 17 años) el acoso se produce en grupos de hasta cinco personas.
La agresividad, las características físicas de una persona, como el peso o llevar gafas, y la venganza son las tres razones más habituales del acoso, que en el 80 % de los casos no produce reacción del entorno escolar. Los profesores, en el caso de los más pequeños, suelen limitarse a escuchar, mientras que en el caso de los preadolescentes hablan más con el acosador. Las expulsiones se dieron en un 14 % de los casos entre adolescentes.
El acoso, además, viaja con la víctima. Porque en la mayoría de las ocasiones un cambio de centro no supone el fin del acoso. Según la estadística, el 88 % de los niños y el 57 % de las chicas que se cambiaron de colegio, volvieron a pasar por ese infierno en el nuevo centro.
Las peculiaridades virtuales
El ciberacoso supone ya uno de cada cuatro casos de acoso, tiene además una serie de peculiaridades con respecto a otros tipos de acoso. Se da más fuera del colegio, el medio más utilizado es el teléfono móvil (en el 90 % de los casos) y dentro del universo de redes sociales, el WhatsApp, lo que permite mantener la intensidad del acoso. El 72 % dicen que el hostigamiento se produce a diario y se sostiene durante un año o más tiempo.
El acoso, además de insultos y amenazas, se ejerce a través de vídeos y fotos comprometidas. La edad media de inicio es superior al de otro tipo de acosos, probablemente porque el acceso a la tecnología llega a una edad más avanzada.
«Instalar o filtro parental pode chegar a dar unha sensación irreal de control»
O problema é a falta de concienciación e de formación, e hai que formar tanto aos rapaces como aos adultos. Por iso, o Colexio Profesional de Enxeñaría Informática de Galicia ten en marcha as iniciativas Navega con rumbo, enfocada a nenos, e Rapaciñ@s, dirixida tamén aos pais. Fernando Suárez é o presidente do colexio.
-Navega con rumbo... ¿como?
-Damos pautas de navegación segura a todos os niveis e tamén pautas para evitar este acoso: que calquera problema llo conten aos maiores, e tamén que saiban que tamén poden ser acosadores sen sabelo: métense con outro neno, seguen a cadea, ocultan ou calan... Queremos incentivar a denuncia, tanto dos acosados como do entorno da vítima.
-Rapaciñ@s tamén implica aos pais.
-Moitas veces falamos de nativos dixitais cando o que xeramos son orfos dixitais, nenos e nenas que non teñen esa figura de educador no ámbito tecnolóxico. Moitas veces os pais séntense inseguros e dicímoslles que poden dar pautas de conduta.
-¿Que dúbidas lle transmiten os pais?
-Falan moito do filtro parental, e nós recomendamos que non se utilice, porque pode dar unha sensación irreal de control porque os rapaces usan tablet, móbil, van a casas de amigos, a centros sociais... e moitas veces instálase sen coñecemento dos fillos e iso xera desconfianza.
-A maioría do ciberacoso dáse por WhatsApp.
-É moi fácil ter acceso a el e mandar unha mensaxe, e pode haber sensación de anonimato, especialmente nos grupos, nos que é moi fácil que un comece a acosar e todos os demais sigan este proceso.