Los críticos de Podemos empujan a la cúpula a unirse ya a la marea gallega

La Voz SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

«A dirección política estatal está pola confluencia», advierten a la secretaria general

23 jul 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Podemos Galicia tiene el alma partida en tres pedazos. Una parte de las bases pretende que la formación concurra a las autonómicas en solitario. La secretaria general, Carmen Santos, quiere que lo haga dentro de la marea gallega, pero sin prisas y como coalición, no en forma de un nuevo partido instrumental. Entretanto, otro grupo de la dirección, encabezado por el diputado Antón Gómez-Reino, apuesta por la confluencia ya y sí o sí, incluso diluyendo la marca propia si es necesario. Poco a poco, esta última facción parece estar ganando la partida al resto: en los últimos 16 días ha hecho perder a Santos dos votaciones sobre este asunto en el consejo autonómico y la ha empujado a fechar una asamblea cuya convocatoria estaba pendiente desde hacía semanas. Además, a través de uno de sus miembros de peso, advierte: «A dirección política estatal está pola confluencia, a ver se todos o entendemos dunha vez».

Elegida en primarias este abril con un apoyo del 41,1 %, la secretaria general, pese a la contestación interna, aparenta tenerlo muy claro. «Podemos -sentencia- non irá na marea se non está presente nela e ten un papel central. [...] Non pode quedar diluído nun partido instrumental porque iso non ocorre en ningunha outra das comunidades españolas, nin sequera en Cataluña. [...] Máis alá de órganos de dirección, sobre todo isto xa se posicionaron os inscritos aprobando documentos políticos».

Esa línea roja de la conservación de la identidad dentro de una marea gallega quedó difuminada de nuevo anteayer, cuando Gómez-Reino y otros 18 miembros del consejo autonómico impusieron su criterio al de Santos y 15 más. La votación, como otra similar celebrada el 7 de julio, carece de carácter vinculante. Pero da alas a los partidarios de acelerar el paso en la integración de Podemos para las elecciones de octubre con Anova, Esquerda Unida, las mareas municipales y otros colectivos menores.

Asamblea el 29

Contra esas urgencias, Santos esgrime que su partido todavía ha de celebrar una asamblea autonómica abierta, que ayer fijó para el 29 de este mes en Santiago. Alega también que, tras dicho encuentro, las bases (unos 20.000 habilitados para ello) han de ser consultadas vía Internet a principios de agosto sobre cómo les gustaría concurrir a los comicios.

En esto último, en que la palabra final la tendrán los simpatizantes, coinciden los díscolos. Pero quieren forzar ya un «posicionamento claro» de la cúpula en favor de la marea gallega. «Non debemos permitir que por retardar sistematicamente decisións se precipite unha situación negativa», argumentan. Su idea es que el aparato de Podemos, con independencia de la posterior consulta a las bases, llegue al 30 de julio alineado con la opción de la confluencia.

Porque ese sábado tendrá lugar en Vigo otra asamblea, la constituyente de la marea autonómica, cuya organización están capitaneando a través de una gestora los alcaldes de Ferrol, Jorge Suárez (Esquerda Unida); Santiago, Martiño Noriega (Anova); y A Coruña, Xulio Ferreiro, próximo a Gómez-Reino y ojo derecho de Pablo Iglesias en Galicia, pese a no militar en Podemos. Los tres regidores se verán hoy de nuevo, en una reunión preparatoria a la que tampoco está previsto que acuda Santos, al igual que a la anterior. A la cita del 30, si el 29 la avalan las bases, sí irá.

En Marea espera al martes a registrar la petición de grupo, que ya hizo A la Valenciana

La constitución de una marea gallega para las elecciones autonómicas de octubre la están capitaneando a través de una gestora los alcaldes de Ferrol, Santiago y A Coruña. En paralelo discurre la trayectoria de En Marea, la coalición de Podemos, Esquerda Unida y Anova que en las pasadas generales logró cinco diputados pese a perder más de 63.000 votos respecto a los comicios del 20D. Esta última la rige una mesa coordinadora que prevé reunirse entre hoy y mañana. Será en ese encuentro, según fuentes de En Marea, en el que la coalición acuerde solicitar oficialmente el martes en Madrid un grupo propio en el Congreso, al igual que En Comú Podem. La petición de ambos, en aplicación de la interpretación mayoritaria del reglamento de la Cámara baja, caerá en saco roto. Será después cuando los diputados gallegos y catalanes tengan que decidir si se marchan al grupo mixto o, más probablemente, como hicieron en la anterior legislatura, se integran en el de Podemos.

La otra confluencia de Podemos, A la Valenciana, ya dio ayer el paso de reclamar formalmente el grupo propio. Cuando les sea denegado, los parlamentarios de Compromís se irán al mixto, como hace seis meses.