Drones, perros y una «app» para la guerra contra la velutina

maría santalla REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

MONICA IRAGO

Se asume que será imposible erradicarla, pero aceptando esta premisa, las Administraciones y los apicultores estudian los mejores métodos para controlar la plaga

26 jun 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

La avispa velutina ha colonizado ya más de la mitad del territorio gallego, pero no solo en Galicia se lucha contra esta especie invasora que amenaza la población de avispa autóctona y, sobre todo, la de abeja. La velutina, originaria de Asia, llegó a Europa en el año 2004 a través del puerto de Burdeos en contenedores de cerámica procedentes de China. En España se detectó por primera vez en Amaiur (Navarra) en el 2010 y desde entonces se ha localizado ya en La Rioja, Asturias, Castilla y León, Baleares, Cataluña, País Vasco y Cantabria, además de Galicia. Se asume que será imposible erradicarla y que en pocos años su presencia estará extendida por buena parte de Europa, pero aceptando esta premisa, las Administraciones y los apicultores estudian los mejores métodos para controlar la plaga. 

El trampeo

El método más extendido. En Galicia, y en general en todas las comunidades afectadas, el método estándar de lucha contra la velutina es la colocación de trampas. En la comunidad gallega se ha realizado esta primavera un trampeo masivo con el fin de capturar a las reinas y evitar así la formación de nuevos nidos. La Universidad de Vigo, en colaboración de la Asociación Galega de Apicultura, desarrolla una investigación para determinar cuál es el mejor sistema de trampeo y cuál resulta menos dañino para otras especies. Las trampas consisten en un recipiente y un líquido atrayente, que puede ser un insecticida comercial o casero -el más conocido de ellos es el elaborado con una mezcla de cerveza, vino y zumo de arándanos-. Pero aunque es el sistema más extendido, el trampeo es muy controvertido. Por una parte, porque en esas trampas caen y mueren otros insectos. Por otra, las investigaciones realizadas en Francia -el país en el que comenzó la lucha contra la velutina- desaconsejan el trampeo primaveral, porque es precisamente en primavera cuando la competencia entre hembras fundadoras produce una mayor mortalidad natural. 

Drones

Para inyectar el veneno. Ya el año pasado la Universidad de Vigo utilizó drones para localizar y fotografiar los nidos de velutina, que habitualmente se sitúan a gran altura en los árboles. Dos emprendedores del País Vasco han querido ir más allá y acaban de presentar un dron que, equipado con una cámara y una lanza, permite inyectar insecticida en el nido y acabar con este. La idea de este artilugio es facilitar la tarea de fumigar los nidos en altura, que ahora mismo se tratan con pértigas desde el suelo. 

La ayuda informática

Vespapp. La avispa asiática se detectó por primera vez en Mallorca en octubre del año pasado. Desde entonces, la Universidad de Islas Baleares ha desarrollado una aplicación informática para localizar su presencia. Vespapp se presentó hace tres semanas y puede descargarse de manera gratuita. La propuesta es que si alguien ve una avispa o un nido haga una foto con la app e identifique su posición exacta. La foto se envía de forma automática y los expertos que la reciben confirman si se trata o no de velutina. En caso de que lo sea se pone en marcha un protocolo de actuación para determinar su ubicación y hacer un seguimiento. Además de ello, la aplicación ofrece información práctica sobre esta especie. 

Perros

Para la detección de nidos. Otra propuesta reciente, que se planteó en unas jornadas de apicultura celebradas hace algunas semanas en Arzúa, es el adiestramiento de perros para la detección de nidos, pues el hecho de que estos se sitúen a gran altura en las copas de los árboles dificulta la visión de los mismos hasta la época de la caída de la hoja. Un adiestrador canino gallego está ya trabajando en ello y la previsión es que el próximo año haya ya algún perro preparado para la localización de nidos. 

Nuevos ensayos

Avispas envenenadas. Apicultores de Gerona ensayaron hace unos meses un nuevo método que recuerda la estrategia clásica del caballo de Troya y que parece estar dando buenos resultados. La técnica consiste en coger algunas avispas e impregnarlas con un insecticida, para después liberarlas. Las pruebas han demostrado que, unas horas después de su regreso al nido, este se había debilitado y, finalmente, las avispas que había en su interior murieron. 

Investigaciones

Enemigos naturales. Las investigaciones francesas han detectado dos enemigos naturales de la velutina que podrían utilizarse para combatir su avance. Se trata de la conops vesicularis, un tipo de mosca, y de un gusano, el pheromermis vesparum. Ambos se alimentan de las vísceras de la avispa. También son enemigos de esta especie las aves y los mamíferos silvestres, como el abejaruco, el halcón abejero y el tejón. 

Minimizar daños

Traslado de colmenas. Aunque no es el caso de la gallega, algunas comunidades autónomas afectadas, como Asturias, recomiendan a los apicultores que tengan sus colmenas a menos de 5 kilómetros de áreas en las que hayan aparecido nidos que las trasladen a zonas más altas.