Renfe se vio obligada a reagrupar viajeros en trenes, que tuvieron que realizar trayectos de pie
22 jun 2016 . Actualizado a las 05:00 h.Aunque las negociaciones con el sindicato de maquinistas (Semaf) continúan y parece que van por buen camino, la estrategia de no colaboración de los conductores con Renfe -que se niegan a cubrir bajas fuera de su horario laboral- ha provocado retrasos y transbordos en autobús en al menos cuatro trenes de larga distancia. El primero que se suspendió fue el Alvia que une A Coruña con Barcelona a primera hora de la mañana. Tampoco salió el Avant que une esta ciudad con Ourense. Todos estos viajeros fueron realojados en un tren de media distancia hasta Santiago, lo que motivó que decenas de pasajeros tuvieron que realizar el viaje de pie. «No nos informaron de las causas del retraso», explica Julián Flores, uno de los afectados.
Los servicios entre Ferrol y Madrid también se vieron afectados por la falta de maquinistas. El tren que partió el lunes a las tres de la tarde de la capital de España y tenía que haber llegado a las 22.09 a Ferrol interrumpió el trayecto en la estación de Ourense. Desde allí fueron trasladados en bus los pasajeros que se dirigían hacia A Coruña y Ferrol. También se vieron afectados los usuarios del servicio que iba a salir ayer, a las 5.55 horas, de la estación ferrolana. Tuvieron que vivir un periplo mayor, ya que desde ese punto fueron trasladados en bus hasta la estación herculina, donde fueron embarcados en un tren de media distancia hasta la estación de Ourense, desde donde se dirigieron a Madrid. En sentido contrario, los viajeros también realizaron el viaje en bus desde Ourense. El tren Pontevedra-Madrid sufrió una hora de retraso, pero por problemas técnicos.
Fuentes de la compañía atribuyeron estos problemas a la falta de colaboración de los maquinistas, pero también argumentaron que el plan de desvinculaciones que se llevó a cabo este año ha provocado dificultades para encontrar nuevos maquinistas.