Un vecino de la mujer hallada muerta alertó de que quedaba sola
01 mar 2016 . Actualizado a las 18:10 h.«Les dije a los técnicos que se llevaron al hombre en la ambulancia que no dejaran sola a la hija porque tenía una discapacidad, pero el propio padre dijo que no. Aseguró que ella podía quedar sola en casa». Es el testimonio de uno de los vecinos de C.S.R., la mujer de 52 años que el sábado fue localizada sin vida por los bomberos en su domicilio de Vigo. La gente del edificio no sale de su asombro. La tragedia familiar se hace más inexplicable con el paso de las horas.
El hombre llamó a los servicios de emergencias «hace unos quince días» para advertir de que algo pasaba en el segundo piso de su edificio. Ayer recordaba lo vivido entonces: «Aquel día avisé de que la hija sufría una discapacidad, pero el padre dijo que podía estar sola». Y añade: «Yo llamé a emergencias porque escuchaba desde el rellano cómo ella le pedía a su padre que se levantara y le advertía de que iba a llamar a una ambulancia, me di cuenta de que había algún problema y por eso avisé». Este vecino estaba ayer visiblemente afectado por la desgracia.
Explica que el hombre, de 83 años, «estaba en el suelo paralizado, como si le hubiera dado una trombosis, pero consciente. Él no quería irse en la ambulancia para no abandonar a su hija, por eso tuvieron que venir dos veces en el mismo día los sanitarios, pero él mismo dijo también que ella podía quedar sola».
Lo que pasó después nadie más que la víctima puede saberlo a ciencia cierta. La mayoría de los conocidos del barrio, en la avenida de Castrelos, se enteraron por la prensa ayer por la mañana de que había fallecido una mujer, pero solo los del edificio sabían de quién se trataba.
En la panadería de enfrente, donde el hombre acudía a diario a buscar el pan, habían notado su ausencia, pero no conocían el alcance de los sucedido. «Hacía más de una semana que no venía a por el pan y nos extrañó, porque además si no bajaba llamaba por teléfono para que se la guardásemos, pero ni siquiera sabíamos que estuviera en el hospital», comentaban ayer tras conocer el fatal desenlace. Varios vecinos aseguraron no saber que la mujer pudiera estar sola o con problemas. «Lamentamos muchísimo no haberlo sabido para poder haber ayudado», indicaba otra de las vecinas en el portal de la mujer. Hay distintas versiones entre los conocidos. El vecino que llamó a emergencias hace días para que auxiliaran al padre afirma que «después de que se lo llevaran, escuché a la hija hablando con él por teléfono». Muchos no sabían ni que el progenitor estaba hospitalizado.
Indican que la fallecida salía en contadas ocasiones de casa y jamás sola. «Siempre iba del brazo del padre y si quedaba en casa le advertía de que no dejara entrar a nadie», comentaban.
Una familia muy apreciada en la zona de Castrelos, donde vivían desde hace tiempo
Ni la ausencia del progenitor ni la de la hija hizo saltar las alarmas hasta que fue demasiado tarde. Ella nunca salía sola del domicilio familiar, por lo que a nadie le sorprendió no verla en los últimos días por la calle. Muy pocos sabían que el padre estaba en el hospital y, en cualquier caso, ninguno sospechó que hubiese ninguna situación de peligro tras la puerta del piso de sus vecinos.
Será la autopsia la que determine las causas del fallecimiento de la mujer. Los primeros indicios apuntaban a una muerte natural si bien el análisis forense concretará la causa y este informe será determinante a la hora de que la autoridad judicial determine sobre si procede abrir una investigación.
Los sentimientos de preocupación e impotencia iban y venían ayer entre los vecinos. Consternados por la duda de si su intervención podría haber evitado el terrible desenlace o, al menos, que la mujer falleciera sola, pensaban también en cómo iba a poder afrontar la terrible noticia su padre.
El progenitor, viudo desde hace años, residía con su hija y una cuñada. El fallecimiento de esta última hace un año, según los vecinos, provocó un profundo dolor en el núcleo familiar. No solían salir a menudo, pero son una familia muy apreciada. Al residir en el centro de la ciudad, la relación con los vecinos no es tan estrecha y, a veces, pasan días sin cruzarse. Los bomberos tuvieron que entrar en el domicilio familiar forzando una ventana y hallaron a la víctima en su dormitorio. La investigación para determinar las circunstancias que concurrieron corre a cargo de la Policía Nacional.