Denuncian ante el Seprona ataques a gatos en Vigo con escopetas de aire comprimido

alejandro martínez VIGO / LA VOZ

GALICIA

ALEJANDRO MARTINEZ MOLINA

Varias vecinas de la avenida del Aeropuerto han encontrado restos de balines en los animales, que llegaban a casa sangrando y con múltiples heridas

18 feb 2016 . Actualizado a las 14:42 h.

Ataques a gatos con escopetas de perdigones han creado alarma en el entorno de la Avenida del Aeropuerto. Afectados han avisado al Seprona para que investigue quién puede estar detrás de estos actos vandálicos. Amalia Adrio vio cómo su gato llegó herido hace unos días. El animal había estado merodeando por los alrededores como hace habitualmente. Esa noche rascó la puerta y su dueña lo encontró con una herida en el hocico. En ese momento no pensó que hubiera podido sufrir una agresión con un arma, pero al día siguiente el gato se encontraba peor. Sangraba abundantemente por la nariz. En una clínica veterinaria le practicaron una radiografía al animal y comprobaron que tenía un balín alojado en el hocico.

Tuvo que afrontar los gastos de una intervención quirúrgica para extraerle el proyectil, porque de lo contrario podría haber muerto a los pocos días. Amalia afirma que actualmente su gato se recupera poco a poco, aunque todavía le quedarán muchos días para que cicatrice la herida. Desde entonces ya no se atreve a sacar al animal de casa, en la parroquia de Candeán, en un núcleo cercano a la Avenida del Aeropuerto, en las inmediaciones del colegio Alborada. Mantiene la ventana cerrada para que no salga, porque tiene miedo a que lo vuelvan a atacar. Además tiene una perra, que del mismo modo permanece muchas horas en el interior del domicilio para que no sea víctima de la sangre fría de algún vándalo.

Otro caso

Olalla Vergara de Sola es propietaria de otro gato que también sufrió un ataque con una pistola de aire comprimido. Vive relativamente cerca de donde apareció el otro gato herido, en la Avenida del Aeropuerto, cerca del monte Vixiador. Del mismo modo, su gata apareció herida en casa. Inmediatamente lo llevaron al veterinario. «Tuvo suerte porque el balín se alojó en el hueso, según el veterinario sería difícil que lo matase, pero sí causa mucho dolor». Tras examinar la herida de su gata, concluyeron que «tuvieron que dispararle desde muy cerca para darle ahí, debieron hacerlo a bocajarro», manifestaba ayer. La herida era limpia pero profunda.

«Es una gata muy buena, probablemente se le acercó», manifestaba ayer. El animal apenas salía de casa, normalmente al jardín y nunca se alejaba de la vivienda. Era una de las gatas con las que trabajaba en centro de terapia asistida con animales Con.tacto en las que Olalla desempeña su labor profesional.

«Que alguien pueda hacer sufrir a un animal para divertirse me da miedo», valora. No es la única agresión denunciada contra animales domésticos. Hace dos años colectivos animalistas denunciaron la propagación de veneno y de trozos de carne con alfileres en espacios públicos como el paseo de Samil o los jardines de Navia. Las redes sociales han reaccionado condenando este tipo de ataques y mostrando su apoyo a los dueños.

«Solo puede ser una mente perversa»

La brigada de defensa de los animales Rescue Galicia ofreció ayer su apoyo a aquellos dueños de mascotas que hayan sufrido estas agresiones. «Apoyamos a cualquier persona que haya sufrido estos sucesos y que de un paso firme y lo diga», manifestó Samuel Barral, portavoz de esta organización.

Afortunadamente los dos gatos que sufrieron ataques con escopetas de aire comprimido en el entorno de la Avenida del Aeropuerto se encuentran ya fuera de peligro después de que sus dueños se hayan preocupado de llevarlos al veterinario para curarles sus heridas. La organización animalista animó ayer a quienes padezcan este tipo de ataques no duden en denunciarlo ante el Seprona de la Guardia Civil u otras fuerzas de seguridad. Al mismo tiempo confían en el resultado de las investigaciones, en vista de la alarma generada tras los últimos incidentes. Muchas personas no se atreven a dejar sus animales de compañía fuera de casa por miedo a que sean objeto de gamberradas.

«Entre todos esperamos que se encuentre al culpable y que pague no solo por el daño que ha hecho a los gatos, sino el daño moral de estos vecinos que tienen miedo».

El colectivo de defensa animal mostró ayer su repulsa «porque estas cosas sigan pasando y nadie haga nada, pero eso decidimos crear Rescue Galicia, para erradicar el maltrato animal y el abandono, en este caso el maltrato que han sufrido unos pobres gatos por parte de alguna mente perversa».