En Marea, a punto de quedarse sin grupo tras fijarlo como objetivo irrenunciable

Carlos Punzón
carlos punzón VIGO / LA VOZ

GALICIA

BENITO ORDOÑEZ

El PSOE le ofrece tener un subgrupo dentro del mixto y la coalición lo rechaza

12 ene 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

En Marea, la coalición tripartita formada por Podemos, Anova y Esquerda Unida, se situó ayer lejos de poder formar grupo parlamentario propio en el Congreso, objetivo calificado por la candidatura como «irrenunciable» tras haber obtenido seis diputados en las elecciones generales, uno más de los que entre otros requisitos exige el reglamento de la cámara baja.

La reunión de la ejecutiva federal del PSOE celebrada por la mañana fue el escenario en el que varios dirigentes socialistas mostraron su rechazo a otorgar la posibilidad de conformar grupo propio a cada una de las coaliciones participadas por Podemos -En Marea (Galicia), Compromís-Podemos (Valencia) y En Comú Podem (Cataluña)- al esgrimir que dicha circunstancia vulneraría el reglamento de la cámara que en 1991 se reformó para impedir que los socialistas catalanes siguiesen contando con grupo parlamentario, con la asignación económica, tiempos de intervención en los plenos y presencia en las comisiones de la Cámara que conlleva.

El rechazo a votar a favor de la formación de los tres grupos parlamentarios fue transmitida por la tarde por el portavoz del PSOE en el Congreso, Antonio Hernando, en una reunión que mantuvo con representantes de En Marea, en la que estos siguieron exigiendo ser considerados en la cámara baja como organización independiente de Podemos o IU, aunque esté formada por diputados de ambos partidos, además de Anova y Ourense en Común.

Según fuentes de las dos formaciones participantes en la reunión, el dirigente socialista ofreció a los diputados gallegos, y a los de las demás coaliciones participadas por Podemos, convertirse en un subgrupo pero dentro del grupo mixto, repartiendo por tanto sus subvenciones y tiempos de participación en los plenos.

Contraoferta rechazada

Rechazada dicha oferta por En Marea, la coalición tripartita propuso al PSOE rebajar la asignación económica que recibiría como grupo -cada uno de la cámara recibe al mes 28.597 euros más 1.645,5 por cada uno de los diputados que tenga más sus sueldos- y también recortar los tiempos a utilizar en cada sesión, fijados en 30 minutos para cada grupo, para facilitar un acuerdo.

La contrapropuesta de la coalición no fue aceptada por el PSOE, por lo que los representantes de En Marea adelantaron que no apoyará al candidato del PSOE a presidir la Mesa del Congreso si no les permite que cuenten con grupo propio.

El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, hizo suyas ayer las dudas que letrados de las Cortes han formulado sobre la posibilidad de que diputados que militan en un mismo partido, como el caso de Podemos o IU, formen parte de varios grupos parlamentarios. El reglamento de la cámara lo prohíbe expresamente, pero En Marea y las otras coaliciones afectadas mantienen que sus diputados no fueron elegidos como integrantes de otros partidos, sino únicamente de la candidatura de la que formaron parte.

Las papeletas que se utilizaron en las elecciones en el caso de En Marea hacía constar bajo su denominación y entre paréntesis la participación de los partidos que integraron la coalición y en el logotipo también el nombre de Podemos, sin especificar junto a cada candidato el partido al que pertenecían. Sin embargo la adscripción partidaria de cada candidato sí que quedó reflejada en la publicación inicial de las listas de toda España que hizo el Boletín Oficial del Estado.

En el caso de las provincias de A Coruña y Pontevedra en la listas para el Congreso y el Senado, En Marea incluyó junto al nombre de los candidatos el partido al que pertenecían o si eran independientes. Dicha especificidad recogida en el boletín el 18 de noviembre desapareció en la publicación definitiva de las candidaturas seis días más tarde a petición de la propia coalición ante la junta electoral para tratar de evitar los problemas para formar grupo parlamentario que al final se ha encontrado igual.

Seis días de margen

En Marea dispone hasta el lunes para convencer al PSOE de que cambie de criterio, aunque integrantes de la coalición lo estiman complicado. Junto con el resto de coaliciones participadas por Podemos, los diputados gallegos participarán hoy en un acto con Pablo Iglesias en el que reivindicarán su exigencia de contar con grupos propios y no pasar al mixto con 28 diputados, de los que uno -de la catalana En Comú Podem- podría ocupar una secretaría en la Mesa. Mientras se sustancia cómo se articula en Madrid En Marea, su diputada y coordinadora de EU, Yolanda Díaz, insinuó ayer que Pablo Iglesias es partidario de mantener la coalición para las elecciones gallegas, posibilidad que el fin de semana fue puesta en cuestión por el secretario general de Podemos Galicia, Breogán Riobóo, crítico con el peso del nacionalismo en el proyecto.