Caos en Alvedro por el desvío de 9 vuelos y mil pasajeros afectados

Susana Acosta
Susana Acosta A CORUÑA / LA VOZ

GALICIA

Los desvíos de ayer
La Voz

Un avión regresó a Madrid tras intentar aterrizar sin éxito en Santiago y A Coruña

27 nov 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

El viernes negro se adelantó en el aeropuerto de Alvedro y en lugar de euforia lo que provocó entre los clientes de las compañías aéreas fue impotencia, aunque hubo también quien se mostró comprensivo con la situación. Y es que cerca de un millar de pasajeros se vieron afectados por la escasa visibilidad y el viento de cola que sopló ayer en Alvedro, obligando a desviar la mayoría de los vuelos que operaron ayer en la terminal coruñesa a Santiago de Compostela. Hasta nueve vuelos fueron desviados -siete de ellos fueron a parar a Lavacolla -por el mal tiempo, aunque también la mala suerte tuvo algo que ver en este particular jueves negro que vivió Alvedro.

Los problemas para Vueling comenzaron cuando el vuelo procedente de Barcelona que salió a las 9.20 horas, tuvo que regresar a la Ciudad Condal al poco de iniciar el vuelo al detectar el piloto un fallo técnico en la aeronave. Los 158 pasajeros que iban en ese vuelo fueron recolocados en otro avión que salió de Barcelona a las 12.15 horas, pero esta aeronave ya no pudo aterrizar en Alvedro por las malas condiciones que había y tuvo que hacerlo en Santiago.

A su vez, la compañía envió sin pasajeros, un nuevo avión a la terminal coruñesa para evitar retrasos a los pasajeros que tenían que coger el vuelo a Londres a las 15.40 horas, pero esta aeronave tampoco pudo aterrizar en A Coruña y fue desviada a Santiago. Lo que obligó a los 143 pasajeros que iban en ese vuelo a ser trasladados en autobuses lanzadera a Compostela. Además, al llegar el avión de Vueling procedente de Barcelona a Santiago, los 158 pasajeros que volaban a Sevilla a las 11.30 horas también fueron trasladados a Lavacolla. El vuelo salió a las 16.22 horas, cinco horas después de su hora prevista. Un retraso que también acumuló el avión de vuelta procedente Sevilla, que salió a las 18.04 horas de la capital hispalense cuando tenía que haberlo hecho a las 13.30 horas. Este avión llegó a la terminal coruñesa pero, tras dos intentos fallidos, no pudo aterrizar en Alvedro y fue desviado también a Santiago. Llegó a las 20.15 horas, cinco horas después de su horario previsto.

Pero Vueling no fue la única compañía que tuvo problemas en aterrizar en Alvedro ante la escasa visibilidad y el fuerte viento de cola que hubo durante prácticamente todo el día. Así, los peor parados fueron, sin duda, los pasajeros del Iberia 0524 procedente de Madrid, que tras intentar aterrizar varias veces aterrizar en Alvedro y Santiago, abortó la maniobra y regresó de nuevo a la capital española. También tuvo problemas para aterrizar el Iberia 522, pero tras varios intentos fallidos y contra todo pronóstico logró dejar a los pasajeros en la terminal de Alvedro. La compañía explicó que en este caso se trasladó hasta A Coruña una aeronave más grande para recolocar a parte de los pasajeros que tenían que haber cogido el avión cancelado.

Resignación de los pasajeros

Air Europa también sufrió desvíos. El de Madrid que tenía que haber aterrizado en Alvedro a las 15.15 horas, lo hizo en Lavacolla a las 17.30 horas. Susana Martínez fue una de las pasajeras de este vuelo que reconoció que el pasaje asumió el traslado a Santiago con cierta resignación: «¡Qué le vamos a hacer! Te sienta falta la verdad pero el piloto lo intentó dos veces y nos explicó que había mucho viento de cola. Nos dijo que había tres opciones, la primera, que ya la había agotado, la segunda, que era volverlo a intentar y la tercera que era irnos a Santiago, como así fue. Lo malo es que luego tienes que hacer el viaje de vuelta. Pero la verdad es que es un rollo», dijo.

Al llegar este avión al aeropuerto de Lavacolla, los pasajeros que estaban esperando en Alvedro también fueron trasladados a Santiago en autobuses lanzadera: «Pues yo he perdido una cita con un fabricante que tenía a las siete. Porque son las siete y media y todavía estoy en el aeropuerto de Madrid. Lo llevamos con cristiana resignación. Yo creo que la gente ya se resigna. Pero es cierto que en cuanto nos lo dijeron ya salimos para coger los autobuses. Estaban también los que iban para Londres», asegura Javier Pardo, que tomó el vuelo de Air Europa para Madrid. Las condiciones meteorológicas dieron una tregua en Alvedro a partir de las 21.25 horas y hasta el cierre de la edición. A esa hora aterrizó el avión de Air Europa de Madrid. Y el de Vueling de Barcelona. El de Heathrow también aterrizó en la terminal coruñesa a las 22.30 horas, dos horas después de la hora prevista.