En el segundo trimestre del año entraron más de 1.800 asuntos penales y se resolvieron otros 1.757, según el Consejo General del Poder Judicial
07 nov 2015 . Actualizado a las 05:00 h.Asuntos penales relacionados contra la violencia machista en Galicia. Ingresados: 1.818. Resueltos: 1.757. Pendientes: 1.975. Son datos correspondientes al segundo trimestre del año del Consejo General del Poder Judicial, que dan la medida de la carga de trabajo de los juzgados gallegos en lo que a violencia contra las mujeres se refiere. Una carga de trabajo que en Vigo, por ejemplo, se traduce en que cada policía asignado a la lucha contra la violencia machista tiene a su cargo a 80 mujeres, una cifra de la que alertó la magistrada viguesa Paz Filgueira, que volverá a pedir un ayudante. Este año ha dictado 120 órdenes de protección, la mitad desde el verano. Los juzgados de Lugo ya rozan la cifra del centenar, mientras que en los seis primeros meses del año, ya se han dictado 83 órdenes en Ourense, lo que según el fiscal jefe y el magistrado especialista en estos asuntos entra dentro de las cifras previsibles. En el caso de Santiago son 25 en el primer semestre del año.
Si en Vigo hay un policía por ochenta casos, en Lugo hay a cargo de la violencia machista un subinspector y y tres agentes. «Os medios son os que son», explica Marta Rodríguez, presidenta de la asociación Si, hai saída, de Lugo. Ella ha visto cómo los agentes se desviven para hacer su trabajo y afirma que «a axilidade policial é máxima» tras una denuncia por violencia machista. Aunque claro, nada es perfecto. «O certo é que ás veces o persoal non está tan sensibilizado coa violencia machista» y las mujeres, que llegan «aturdidas, aterrorizadas e dun proceso normalmente moi longo», no encuentran todo el amparo que necesitan.
Y tras la labor policial, llega el juzgado. Rodríguez afirma que las resoluciones pueden «demorarse meses» y que las órdenes de protección, en ocasiones, no llegan tan rápido como deberían. «Sei que están colapsados, pero todos sabemos que en violencia machista, a reacción non ten que ser rápida, ten que ser o seguinte».
En Lugo hay cuatro personas designadas a estos casos. En Santiago, otras tantas. Uno por cada seis mujeres víctimas de malos tratos. Diferente es el caso de Monforte. Hace unos meses había dos agentes designados a esta labor. Uno de ellos se jubiló. Su plaza sigue vacante, por lo que solo una persona se hace cargo de los casos de violencia contra las mujeres.
Dos especialistas y 18 concellos
En el área metropolitana de A Coruña -Arteixo, Cambre, Culleredo, Oleiros y Betanzos- cuentan con una unidad especializada, La Emume. Los policías de Cambre tienen formación especializada y hacen seguimiento a siete personas. El resto de los casos son competencia de la Guardia Civil. También en Arteixo -con 55 casos bajo vigilancia- las competencias se reparten entre policía y Guardia Civil, mientras que en Betanzos hay dos agentes del instituto armado los que se han especializado en violencia machista, pero prestan asesoría a otros cuarteles y policías locales de la comarca. En definitiva, dos personas especializadas para 18 ayuntamientos.
«A formación é esencial», afirma Marta Rodríguez, «algo tan elemental como comer e respirar» y por eso, la presidenta de Si, hai saída, cree que habría que seleccionar con todo cuidado a las personas que se dedican a estos temas para evitar que las víctimas se sientan abrumadas por la burocracia. «Sobre todo, sensibilidade». Y denunciar siempre.
Con las aportaciones de X. Melchor, E. Silveira, S. Acosta, T. Silva, C. Cortés, P. Seoane y X. Carreira