Podemos Galicia defiende las contrataciones y niega oscurantismo en las cuentas
GALICIA
La formación argumenta que la decisión se tomó por los cauces reglamentarios y que los salarios los fija la estatal
04 sep 2015 . Actualizado a las 05:00 h.El secretario general de Podemos Galicia, Breogán Riobóo, defendió ayer en Ferrol los sueldos que cobran él y cuatro miembros más de su equipo y la transparencia de las cuentas de la formación. Tras las críticas vertidas por Bases Podemos, que acusó de «dedazo» a la dirección gallega, argumentó que fue una «decisión tomada polos cauces reglamentarios». La responsable de Finanzas, Susana López Verde, a la que los críticos acusan de haber sido contratada al día siguiente de acabar el paro, defendió que su cargo precisa de personal cualificado y que «es iluso pensar que hay que abrir un proceso de oposición para un puesto así». Además, defendió no ser una recién llegada, tras más de un año en la formación: «No he aparecido ayer», señaló. Además, argumentó que los salarios están establecidos por la dirección estatal y que la previsión es que «a medio o largo plazo la idea es tener más personal contratado».
Cuentas trimestrales
Riobóo negó que exista «oscurantismo» respecto a las cuentas, y que «cando chegue o momento de consolidar as contas» se darán a conocer, alegando que el trimestre contable se cierra el próximo 30 de septiembre. Susana López señaló que la información con que cuentan los críticos es «un documento pequeño que hice a nivel interno, pero que no son las cuentas». En ellas se recogían cargos como, por ejemplo, gasto plurinacional, que la responsable de Finanzas atribuyó a vuelos para traer a Galicia a miembros de Podemos como Íñigo Errejón.
Respecto a los procesos de confluencia, el líder gallego se mostró «aberto ao diálogo» con «todos os colectivos» y considera que para los ciudadanos «non é relevante» cómo se denomine esa candidatura conjunta, sino contar «cunha papeleta real de cambio».
Bases Podemos reclamó ayer la renuncia de los miembros que quedan en el consejo ciudadano de Vigo, tras la cadena de dimisiones de casi la mitad de sus componentes, lo que, considera, le ha hecho perder legitimidad a este organismo.