Isabel Fuentes, la mujer de Verín asesinada supuestamente por su marido, recibió tres puñaladas, agresiones que buscaban directamente órganos vitales
06 ago 2015 . Actualizado a las 11:44 h.Una puñalada directa al corazón desde el costado izquierdo acabó hacia las siete de la mañana del 8 de mayo en una habitación del Complexo Hospitalario Universitario de Ourense (CHUO) con la vida de Isabel Fuentes, la mujer de Verín asesinada supuestamente por su marido Aniceto Rodríguez. Los primeros datos que trascienden sobre las circunstancias concretas del homicidio en el hospital ourensano apuntan a que recibió tres puñaladas, unas agresiones que buscaban directamente órganos vitales. Este extremo fue confirmado por uno de los familiares de la víctima, Santiago Martínez. También aclaró que la intención inicial de su abogada, Beatriz Seijo, es pedir al menos 45 años de prisión para Rodríguez.
Esta solicitud de penas respondería a la comisión de dos presuntos delitos de asesinato, uno en grado de tentativa -por la primera agresión a Isabel, supuestamente cometida también por su esposo en abril- y otro consumado en el CHUO. Los delitos llevarían aparejados la agravante de parentesco. La prima de Isabel Fuentes, Teresa Fernández, cree que el hecho de que el mismo día del asesinato fuera a llegar a Ourense una prima carnal de Isabel para visitarla y que la asesinada comenzara a poder hablar tras mejorar de las lesiones del primer ataque pudieron precipitar el homicidio. Rodríguez, que permanece en la prisión de A Lama, es carnicero jubilado y sabía «manejar perfectamente un cuchillo», según recuerda Fernández.
La familiar rememora que «ese mismo día iban a quitarle a Isabel el tubo de la garganta tras la traqueotomía que le tuvieron que practicar. Yo hablé con Aniceto la noche anterior y parece que no quería, bajo ningún concepto, que entrara ninguna visita en la habitación del hospital si él no estaba presente. Seguramente porque ya estaba planificando lo que hizo de después».
Posible recusación
Los primos de la finada no descartan recusar a Cristina María Fernández Viforcos, la jueza de Verín instructora de la causa, que no ordenó una orden de alejamiento para Rodríguez, pese a los informes de la Guardia Civil que así lo aconsejaban. El Consejo General del Poder Judicial abrió hace semanas un procedimiento informativo por este caso para evaluar la actuación de Fernández Viforcos. «Ella no protegió a Isabel. Es imperdonable que no hiciera caso a la Benemérita», lamentan.