La Xunta entrega los primeros pisos sociales de alquiler cedidos por la Sareb

redacción / la voz

GALICIA

Los inmuebles están en Vigo, Porriño y Culleredo

02 ago 2015 . Actualizado a las 04:00 h.

La Xunta entregó ayer las primeras viviendas sociales de alquiler cedidas por Sareb (Sociedad de Gestión de Activos procedentes de la reestructuración bancaria) también conocido como «banco malo». El Instituto Gallego de Vivienda y Suelo, dependiente de la administración autonómica, entregó los primeros cuatro pisos en Vigo, Porriño y Culleredo, que se destinarán al alquiler de personas desahuciadas, como parte de un programa de ayuda social. Esta operación se incluye dentro de un convenio firmado entre la Sareb y la Xunta, que prevé que el «banco malo» le ceda al gobierno gallego un centenar de viviendas por un período de cuatro años prorrogable para personas en riesgo de exclusión sociales. En principio, está previsto que se entreguen otras seis en las próximas semanas tal y como señaló recientemente la Xunta.

Hace dos semanas la Xunta presentó una de las viviendas cedidas por las Sareb en Vigo. Se trataba de un inmueble a estrenar, en este caso, procedente de un promotor que lo logró venderlo ni de pagar el préstamo. Esta vivienda ubicada en una décima planta tiene cocina, baños, dos dormitorios y dos terrazas con vistas. En otros casos, los pisos ya tienen años, e incluso décadas. Las familias adjudicatarias pagarán un alquiler que irá entre cero y 125 euros, en función de su situación económica, y gracias a la subvención que reciban del IGVS.

170 viviendas

El IGVS gestionará, de momento, un total de 170 viviendas, de las que el 80 por ciento se destinarán a afectados por los desahucios. De ellas, 50 proceden de la Sareb, 100 Abanca y 20 de la Caixa Rural Galega. De las 150 de las dos primeras entidades, el 47 por cientos se encuentra en la provincia de Pontevedra, al ser también la más afectada por los desahucios como consecuencia de las ejecuciones hipotecarias y del impago de los alquileres. Los convenios suscritos entre el IGVS y las entidades financieras estipulan que estas ceden el usufructo de su propiedad para que la Xunta la dedique al alquiler social. En total son doce municipios en los que la Sareb cede pisos y 51 los de Abanca.