La Academia Galega recurre al Constitucional el decreto del plurilingüismo

Elisa Álvarez González
Elisa Álvarez SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

El recurso considera que esta norma «vulnera» el derecho a la igualdad de las personas que hablan gallego

29 abr 2015 . Actualizado a las 00:54 h.

La Real Academia Galega ha decidido presentar un recurso de amparo ante el Tribunal Constitucional por el decreto del plurilingüismo en la enseñanza. El proceso judicial contra la norma que regula el gallego en la enseñanza comenzó en el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia, que anuló dos de los puntos del decreto. Posteriormente la RAG decidió acudir al Supremo con un recurso que fue desestimado. Es contra esta sentencia desestimatoria contra la que la Academia ha decidido llegar al Constitucional.

El principal motivo de la decisión adoptada en el plenario de la RAG es la defensa de los derechos «das persoas galegofalantes, que considera vulnerados polo devandito decreto». El concepto de normalización lingüística está detrás de toda esta argumentación. La Constitución recoge el derecho a la igualdad, una igualdad material que obliga a los poderes públicos a remover los obstáculos que se interpongan en su consecución, llevando a cabo acciones positivas en personas o colectivos marginados. En lo que se refiere a la lengua, esta acción positiva es lo que se conoce como normalización lingüística.

La Real Academia Galega entiende por lo tanto que el decreto del plurilingüismo elaborado por el gobierno del PP cuando llegó a la Xunta «perpetúa a situación de inferioridade da lingua galega» al excluir taxativamente su uso en las materias científicas. La propia jurisprudencia del Tribunal Constitucional establece que las dos lenguas oficiales deben tener una presencia en la enseñanza para garantizar la consecución de la igualdad, lo que para la Academia no se consigue con el decreto que establece un rígido equilibrio entre las dos lenguas oficiales. De hecho, aunque la propia norma dice desenvolver la Lei de Normalización Lingüística «en realidade está en aberta contradición con esta», sostiene la institución que preside Alonso Montero.

Cuando el bipartito aprobó el decreto del gallego, el PP se apresuró a prometer que lo derogaría si ganaba las elecciones. Esta norma establecía el 50 %, pero como porcentaje mínimo que debía impartirse en gallego. El Partido Popular también recurrió al 50 % en su decreto del plurilingüismo, pero para garantizar que castellano y gallego tuviesen la misma presencia en las aulas. Al introducir un tercer idioma, el gallego pierde presencia en las aulas respecto a la norma del bipartito.

La justicia y el gallego

La legislación del PP fue recurrida ante el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia, quien anuló dos puntos importantes del decreto, la libertad que introducía para que los alumnos usasen castellano o gallego indistintamente del idioma en el que se impartiese la materia; y la consulta a los padres en infantil sobre la lengua.

La RAG afirma que se «perpetúa a situación de inferioridade da lingua galega»

La Xunta cree que el proceso judicial se cerró con el fallo del Supremo

El secretario xeral de Política Lingüística, Valentín García, mostró su respeto a la posición de la RAG tras conocer la intención de la Academia de recurrir al Constitucional. Sin embargo, para el responsable de la política lingüística de la Xunta el proceso jurídico del decreto del plurilingüismo está finalizado. «Para nós, este capítulo dámolo por rematado», apunta. Valentín García insiste en que la sentencia del Tribunal Supremo es contundente al desestimar el recurso de la Real Academia, «e esperamos outra ratificación do Constitucional».

Una de las encomiendas del presidente de la Xunta al nuevo conselleiro de Educación, Román Rodríguez, fue recuperar el consenso del gallego. Sin embargo, desde un primer momento la retirada del decreto del plurilingüismo no estuvo encima de la mesa. El discurso de Román Rodríguez pasa por buscar acuerdos en los puntos de unión, y de hecho ha impulsado un plan para fomentar el gallego en el tejido económico de Galicia.