Investigan si Monbus regaló relojes, jamones y botellas de vino a mandos militares

Xosé Carreira LUGO / LA VOZ

GALICIA

Raúl López, el sábado, llegando a los juzgados.
Raúl López, el sábado, llegando a los juzgados. ALBERTO LÓPEZ

Supuestamente hubo pagos de mariscadas en Madrid y cesión de coches para llevar más de mil latas de cerveza a una fiesta

24 mar 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

En uno de los registros efectuados en una instalación militar de Alcalá de Henares, en el marco de la operación Cóndor, fueron halladas listas de regalos. La jueza De Lara investiga ahora si los receptores fueron altos mandos del ejército y si quien los hacía era el magnate del transporte Raúl López en nombre del grupo Monbus. El empresario lucense, que logró la concesión del servicio de transporte de los militares, dijo en su larga declaración del pasado sábado que desconocía ese tipo de actividad. El industrial estuvo detenido 72 horas y quedó en libertad tras el pago de 20.000 euros de fianza. Mañana tendrá que hacer una de las dos comparecencias semanales que le ordenó la jueza.

Los integrantes del equipo de Aduanas que trabajan en la Cóndor están revisando la documentación que se llevaron de la Brigada Paracaidista (Bripac) de Alcalá de Henares. La jueza, en los interrogatorios del pasado fin de semana, preguntó por las listas en las que aparecían anotados jamones, botellas de vino y también relojes. La investigación abierta pasaría ahora por determinar si esos regalos fueron destinados a mandos y están relacionados con la concesión obtenida en su día por parte de Monbus.

La magistrada incluso investigaría una relación de entradas que supuestamente recibieron militares de alta graduación para acceder gratuitamente a corridas de toros. Los investigadores sospechan que, al igual que sucedía en la Pokémon, circulaban las mordidas en pago de presuntos favores. Entre las listas encontradas figura otra con anotaciones de relojes. Todos ellos eran de prestigiosas marcas. También la jueza preguntó por estos detalles a alguno de los militares que estuvo detenido en las últimas horas.

De los documentos incautados parece desprenderse que estaban establecidas varias categorías de regalos: muy buenos, buenos y regulares. Al parecer, algunos mandos llegaron a elegir los presentes en base a sus gustos.

Mariscada y cerveza

Aduanas llevaba tiempo siguiendo los movimientos que supuestamente realizaban desde Monbus. De hecho, los agentes comprobaron que algún militar de rango fue a una mariscada a un restaurante de Madrid y ahora tratan de saber quién abonó la factura y cuál pudo haber sido la razón de la invitación.

Las pesquisas abiertas también están orientadas a tratar de saber si Monbus facilitó vehículos ligeros de su flota para celebraciones de carácter privado organizadas por algún mando. Uno de esos coches supuestamente fue usado para el transporte de más de mil latas de cerveza para consumir en una fiesta.

Puestos de trabajo

Supuestamente, las relaciones entre determinadas personas de Monbus y algunos militares de alta graduación de la Bripac serían muy fluidas hasta el extremo de que habría peticiones y también ofrecimientos de puestos de trabajo.

Al parecer, los agentes de Aduanas dispondrían de correos electrónicos enviados entre militares y representes de la empresa en los que se pondría de manifiesto que el grupo lucense de transportes recibiría información privilegiada sobre las condiciones del concurso para el transporte de los integrantes de la brigada paracaidista. Toda la documentación comenzó a ser estudiada, y de los informes que elaboren los investigadores dependerá si se producen más imputaciones por parte de la jueza.

Los dos militares detenidos fueron un teniente coronel y un sargento de la Bripac. Fueron conducidos a Lugo en dos furgonetas del ejército y los acompañaron policías militares. El de mayor graduación declaró por espacio de más de dos horas. Quedaron en libertad aunque no tuvieron que depositar ninguna fianza como sucedió con Raúl López, que puso 20.000 euros, y con su yerno Rafael Casqueiro, responsable de líneas de largo recorrido, que aportó 15.000.

Detenida una mujer que hacía de enlace

En la operación Cóndor hay, por el momento, un total de 11 detenidos. El último fue una mujer de nacionalidad colombiana, que trabaja para Monbus en la zona de Madrid. Supuestamente esta mujer tenía, entre otras misiones, la de hacer de contacto entre algunos mandos militares y el grupo con sede en el polígono lucense de A Louzaneta. Todos los detenidos quedaron en libertad con cargos después de haber pasado por el despacho de la jueza. Algunos de ellos optaron por no declarar.