«É imposible pronunciarse sobre se o tribunal reúne os requisitos de capacidade e imparcialidade», afirma el responsable de fiscalizar el gasto
07 mar 2015 . Actualizado a las 05:00 h.Cuando todo estaba listo en el Concello vigués para la contratación de más de un centenar de desempleados en el marco del plan Vigo Emprega, un informe de Intervención cayó como una losa en la alcaldía. El responsable de la fiscalización del gasto municipal, Luis García Álvarez, cuestionó por escrito la composición del tribunal que seleccionó a los elegidos y se negó a darle el visto bueno. Ante ello, el gobierno de Abel Caballero no ha tenido otro remedio que paralizar las contrataciones cuando ya se había informado a los beneficiarios y estaban publicadas las calificaciones en la web municipal.
Vigo Empresa lleva varios años ejecutándose y es la vía para formar y contratar a personas desempleadas, que en muchos casos se encuentran en riesgo de exclusión social. Además de darles formación en diferentes profesiones, después son contratadas por el Concello para realizar obras al servicio de la comunidad.
Esta vez se habían convocado 140 plazas, una cifra superior a la habitual en un ejercicio clave por la inminente celebración de las elecciones municipales, y ya se había informado del inicio de la actividad. Habían sido seleccionadas por ser mujeres en paro, menores de 30 años en busca del primer empleo, mayores de 45, parados de larga duración o discapacitados, todos ellos colectivos de difícil empleabilidad. El objetivo era que desarrollaran actividades de conductores, albañiles, jardineros, electricistas, fontaneros, pintores o mecánicos, entre otros.
Sin embargo, cuando días atrás el expediente iba a ser aprobado en la junta de gobierno local saltó la bomba: el interventor se negaba a informarlo y lo hacía constar por escrito, con lo que ya no había marcha atrás. Y no se trataba de un tema menor ya que cuestionaba el proceso de selección: «É imposible pronunciarse sobre se o tribunal reúne os requisitos de imparcialidade e capacidad necesarias para efectuar a selección». Además, resalta el documento que «non se incorpora un informe do responsable do servizo» que certifique que se han cumplido las bases para realizar la selección. El problema que se le plantea al gobierno vigués es complejo, según fuentes municipales, ya que las pruebas se han celebrado y están publicadas las calificaciones. En el supuesto de tener que repetirlas la conmoción sería grande para el centenar largo de parados a los que ya se les había comunicado que iban a tener un empleo. Sin embargo, no podrían hacerse por segunda vez sin contar con los suspendidos si el tribunal se conformó sin atenerse a la legalidad.
De momento, el interventor dice por escrito que «non constan as acreditacións de titulación, cualificación profesional e outras dos membros da comisión de selección». Un fiasco que en este caso se produce en el departamento dirigido por el exsindicalista Santos Héctor Rodríguez, quien durante muchos años fue secretario comarcal de UGT y ahora es un estrecho colaborador de Caballero y secretario provincial del PSdeG. El proceso para estas contrataciones se inició en enero.
Un sistema con el que se ha dado trabajo a 600 personas desde el año 2008
El alcalde vigués llegó a la alcaldía en el año 2007 prometiendo que lograría el pleno empleo en Vigo y que la primera visita a la ciudad de un conselleiro tras su toma de posesión sería la de Ricardo Varela, responsable de Traballo en la etapa del presidente socialista Emilio Pérez Touriño. Esta segunda parte se cumplió, pero evidentemente no la primera. Varela se reunió con Caballero para planificar convenios de empleo con financiación autonómica, pero el desempleo se duplicó en su etapa. Este trato vip para el Concello vigués tuvo escaso recorrido una vez que la Xunta cambió de manos en el 2009, pero el alcalde vigués desde entonces convirtió a la Xunta en el objetivo prioritario de sus críticas.
Tendencia al alza
Pese a sus quejas de que los fondos para empleo llegan desde entonces en menor cuantía se trata de un departamento bien surtido con financiación propia. Entre el 2008 y el 2014 solo con Vigo Emprega se ha contratado a 600 desempleados, con una tendencia al alza desde los 61 del primer año a los más del triple previstos en las dos del 2015.
Los beneficiarios del programas reciben en cada ejercicio la visita del alcalde y se pone siempre como ejemplo de la preocupación municipal por luchar contra el paro. Sin embargo, desde hace tres años el equipo de Caballero dedica el monto económico principal a dar dinero municipal a todo tipo de entidades sociales, asistenciales y ciudadanas para que contraten personal de manera directa.