Feijoo evita respaldar a Mosquera tras las siete dimisiones del comité

m. cheda, d. sampedro SANTIAGO / LA VOZ

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La oposición sale en tromba a exigir la destitución de Rocío Mosquera

04 mar 2015 . Actualizado a las 08:40 h.

La conselleira de Sanidade tendrá que afrontar en solitario el conflicto surgido al negarse a publicar un informe sobre desigualdades encargado previamente a la Comisión Galega de Bioética, una censura que ha derivado en la dimisión de siete de los 17 miembros del citado órgano asesor. Ayer, el presidente de la Xunta evitó apoyar explícitamente a Rocío Mosquera en esa polémica. De hecho, se desentendió del asunto.

Preguntado por la prensa acerca de si respaldaba o no a la titular de la cartera en su controvertida decisión, Alberto Núñez Feijoo no contestó de manera directa. «Non coñezo ese informe, pero estou convencido de que a conselleira dará as explicacións correspondentes. [...] Sobre o informe concreto e a cuestión concreta, seguro que ela pode dar resposta concreta», despejó balones a la salida de un acto institucional en Santiago.

De ese guion no se salió más que para enfatizar que comisiones sanitarias como la de las dimisiones en masa «hai moitísimas», amén de para agradecer la labor de los integrantes de este tipo de comités de expertos. Aun más, en un intento de desviar la atención, el mandatario cambió de tema y, motu proprio, se arrancó a señalar «a nova máis importante neste momento no eido da Sanidade»: el acuerdo alcanzado por la Administración central con las autonómicas para el tratamiento de los enfermos de hepatitis C, un motivo de satisfacción «para os que cremos na sanidade pública».

De todas formas, respecto a la dimisión de los siete miembros de la comisión, la conselleira ya adelantó el mismo día su intención de sentarse a dialogar para tratar de buscar una forma de solucionar el conflicto. Mosquera explicó sobre la no publicación del informe que hay documentos que se publican y otros que no se dan a conocer. Se refiere a trabajos que sirven para la reflexión interna. La conselleira reconoce que la Comisión Galega de Bioética es muy activa y con un nivel alto de discusión.

Mientras, en el Parlamento, todos los grupos, con la excepción del PP, reclamaron ayer a Feijoo que cese a la responsable de Sanidade. El portavoz socialista, José Luis Méndez Romeu, puso de relieve que el «grao de arrogancia» alcanzado por Rocío Mosquera es «algo fora do normal». Entiende el PSdeG que su «incompetencia» de la conselleira está rozando su techo y que debe ser destituida.

El portavoz de AGE, Xosé Manuel Beiras, fue un paso más allá y advirtió de que si Feijoo apoya a la conselleira de Sanidade, debería «dimitir el mesmo», pues la ve «corresponsable» de la industria farmacéutica en lo que atiende a las restricciones para suministrar los medicamentos a los enfermos de la hepatitis C. La viceportavoz de AGE, Yolanda Díaz, subrayó que el informe que ha originado las dimisiones evidencia las consecuencias de la política de recortes de la Xunta.

Desde el BNG, su portavoz, Francisco Jorquera, no tiene duda de que Rocío Mosquera «ten que dimitir», pues entiende que con sus decisiones «degrada cada vez máis a sanidade pública», a la vez que la «vampiriza» en favor de la sanidad privada. Entiende Jorquera que, tras la promoción que hizo la conselleira de su marido en el organigrama del Sergas, lo más razonable sería que Feijoo «asuma a súa responsabilidade» y la destituya del cargo.