La nieve deja atrapados durante horas a doscientos coches en O Cebreiro

Dolores Cela Castro
dolores cela LUGO / LA VOZ

GALICIA

Los vehículos aparcados en las cunetas cerraron el paso a la quitanieves

19 ene 2015 . Actualizado a las 11:53 h.

La nieve atrapó durante varias horas a unos doscientos coches que accedieron hasta el poblado de O Cebreiro, en la carretera LU-633, de Pedrafita a Sarria, para disfrutar de una jornada dominical en familia. El tapón se produjo al mediodía porque los vehículos aparcaron a ambos lados de la carretera y el sitio que dejaron de la calzada no era el suficiente para que pudiera pasar la máquina quitanieves.

La situación empeoró en el momento en el que cayó una nevada considerable que cubrió la calzada. Provocó algún que otro deslizamiento con el consiguiente toque a otros vehículos, y coches atravesados que fue necesario retirar a mano. Buena parte de los vehículos que formaban las colas habían accedido a la montaña sin cadenas, lo que dificultó que pudieran moverse en la nieve.

Según algún conductor atrapado, que estuvo retenido entre las cuatro y cuarto de la tarde y no logró llegar hasta la capital del municipio, donde se enlaza con la Autovía del Noroeste, hasta las siete, hubo dos puntos conflictivos. Uno estaba localizado a tres kilómetros de Pedrafita, en la zona más próxima a O Cebreiro y el otro a aproximadamente dos kilómetros.

Los coches pudieron salir gracias a la máquina quitanieves, cuyo conductor, según testigos presenciales, demostró una gran pericia para dirigir por dónde tenían que ir apartando, a empujones, los coches atascados. De esa forma pudo pasar la cuña y los turismos, principalmente aquellos que accedieron a la montaña sin cadenas.

Curvas con hielo

Las colas de coches se formaron no solo de O Cebreiro hacia Pedrafita, sino desde el poblado prerromano hacia el Alto do Poio. En este tramo había una curva con hielo, que echó de la carretera a más de un vehículo, pese a que circulaban con precaución, dadas las circunstancias.

Lo ocurrido ayer en O Cebreiro no fue algo excepcional, sino que se repite los fines de semana de nieve por la gran cantidad de personas que quieren acceder al poblado en coche y que no tienen dónde dejarlo, salvo en la cuneta, lo que cierra el paso a las quitanieves. Algunas voces, incluida la del alcalde de Pedrafita, consideran que sería una buena iniciativa poner en funcionamiento un microbús todoterreno que transportara a los visitantes por las carreteras nevadas.

O Cebreiro no fue el único punto conflictivo ayer en la montaña lucense. Vecinos de A Seara y de Visuña, en la carretera de Quiroga a Ferramulín, en O Courel, solicitaron la presencia de la quitanieves de la Diputación porque no podían mover sus coches atrapados en la nieve. Fue al mediodía.

Otra pala del organismo provincial tuvo que desplazarse al albergue de Os Ancares para facilitar la salida a cinco coches que tenían dificultades para bajar hasta Becerreá. Las máquinas quitanieves estaban anoche trabajando y preparadas para salir a abrir camino a diferentes aldeas de la provincia.