Las pallozas de Piornedo peligran a la espera de una reforma urgente

Marta de Dios Crespo
Marta de DIos LUGO / LA VOZ

GALICIA

OSCAR CELA

Las subvenciones no acaban de llegar para estas construcciones declaradas BIC, que llevan cuatro años abandonadas a su suerte, y las primeras nevadas aceleran el deterioro

28 dic 2014 . Actualizado a las 05:00 h.

Los vecinos de Piornedo (Cervantes, Lugo) saben que las pallozas no aguantarán otro invierno. Son un emblema de Galicia y a pesar de su declaración como Bien de Interés Cultural (BIC) llevan años abandonadas a su suerte. La Xunta se encargaba de destinar una partida anual para su mantenimiento, pero desde el año 2010, con la llegada de la crisis, se cortó el grifo.

Situado a 1.300 metros de altitud, Piornedo es un conjunto etnográfico que pertenece a la época prerromana. Algunos expertos consideran las pallozas familiares lejanas de los castros celtas. Construcciones que se han convertido en un símbolo de la Galicia rural y que salpican este concello de Os Ancares lucenses. Desde 1971 Piornedo cuenta con reconocimiento como paisaje pintoresco, aunque no es hasta la década de los 90 cuando consigue la declaración de BIC. Un arma de doble filo, porque es precisamente esta sobreprotección la que podría acelerar el derrumbe de algunos techos este año.

Las ayudas para su conservación empiezan a llegar en 1998, tras el duro trabajo del arquitecto Pedro de Llano que peleó durante más de dos décadas por el reconocimiento y la protección del patrimonio ancarino. Ese año se consignaron 94 millones de pesetas para rehabilitar el conjunto histórico. Y hasta el 2010 se destina una cantidad aproximada de 26.000 euros anuales.

El alcalde del concello, del PSOE, Benigno Gómez, ya ha solicitado a Patrimonio que le permita cubrir con lonas aquellas pallozas más deterioradas, a fin de que no se vengan abajo mientras no llegan las subvenciones para su conservación. Lugares de la misma parroquia de Donís, como Moreira, ya han cubierto sus pallozas con uralita. Saben que no es una solución estética, pero es el último recurso que tienen los vecinos para conservar estas construcciones. Techar estas pallozas tiene un coste aproximado de 30.000 euros y aunque muchas son propiedad privada, son patrimonio de todos.

Quienes conocen las pallozas en profundidad saben que es mucho más rentable mantener la cubierta de paja en buen estado que esperar a que el armazón de madera se pudra por la humedad. La paja de estos tejados singulares tiene un espesor de unos 30 centímetros, es paja prensada y de buena calidad que en su mayor parte llega de León. Una construcción de este tipo bien techada puede aguantar unos 15 años sin ningún tipo de tarea de conservación, que es aproximadamente lo que lleva la Xunta sin renovar estos tejados. Cuando se acomete el mantenimiento, la vida de estos techos puede prolongarse hasta el doble de tiempo.

Los vientos que se dejan sentir en la zona a lo largo del año, mueven la paja de los tejados que, sin nadie encargado de recolocarla, permiten el paso a la lluvia y la nieve que acaba por pudrir el armazón de madera. En ese estado se encuentran ahora buena parte de las construcciones prerromanas de Piornedo.

Tras 16 años sin cambiar los techos y cuatro años sin mantenimiento, muchas pallozas acusan un estado crítico. La situación es especialmente dramática puesto que Piornedo es el reclamo turístico más importante de Os Ancares lucenses. Su referencia aparece en cualquier guía turística de Galicia y cientos de rutas de senderismo recomendadas por las administraciones gallegas desembocan en este lugar de Cervantes.

Xunta y Diputación suscribieron un acuerdo este otoño para dotar a Piornedo de 260.000 euros para la rehabilitación de estas construcciones, pero el dinero todavía no ha llegado y las administraciones -de siglas políticas contrarias- están sumidas en una discusión sobre quién ostenta la responsabilidad de que las pallozas estén en riesgo de derrumbe. «Lamento que chegue o inverno e os teitos das pallozas non estén arranxados», confesaba hace apenas unos días la responsable territorial del Gobierno de Feijoo, Raquel Arias, que esgrime: «Puxemos os cartos precisos para o reteitamento» y le pasa la patata caliente al organismo provincial, que dirige Besteiro, líder de los socialistas en Galicia.

Curiosamente, es la palloza que tiene en propiedad la Xunta de Galicia la que se encuentra en un estado de deterioro más avanzado, la paja se ha movido a tal extremo que deja a la vista la estructura de madera de esta construcción. La suerte para esta localidad es que de momento no ha nevado demasiado este invierno que apenas ha rozado Galicia.

De estas construcciones protegidas, quedan en Piornedo unas 27 en pie. Doce destinadas a vivienda -a día de hoy todas se encuentran deshabitadas, aunque en los 70 todavía tenían moradores-, tres para almacenar paja y en algunos casos ganado (que solía guardarse en la propia vivienda) y otras 12 construcciones de este tipo son hórreos.

Visto lo visto, a los 16 vecinos que quedan en Piornedo no les queda otra que mirar al cielo y rezar por un invierno amable.