Detenido un gallego en Vizcaya por el asesinato de su mujer y su suegra

Redacción / La Voz

GALICIA

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Ellas aparecieron muertas en la cama con signos de violencia. Él fue hallado herido leve y atado por los pies, mientras ardía su carpintería

11 dic 2014 . Actualizado a las 19:22 h.

Benito Quintairos Folgoso, natural de Atas, en el municipio ourensano de Cualedro, fue detenido ayer por la Ertzaintza como presunto autor de las muertes de su mujer, Mari Luz Alejo Rodríguez, de 60 años, y de suegra, Amelia Rodríguez Sardón, en Abadiño (Vizcaya). El arresto se produjo por la tarde tras prestar declaración en dependencias de la policía vasca, según informaron fuentes de la investigación.

Por el momento, el detenido, el ourensano Benito Quintairos, permanece en dependencias de la Ertzaintza en Durango, a las que fue conducido, poco antes de las ocho de la tarde del miércoles, para prestar declaración, según han informado a Europa Press fuentes del Departamento vasco de Seguridad.

Los indicios recogidos en la carpintería, así como otros datos de la investigación recopilados por la Policía vasca, avalaron la detención de Quintairos bajo la acusación de homicidio. Otras fuentes de la investigación consultadas por Europa Press aseguran que el arrestado confesó, durante su declaración, la autoría de ambos crímenes. Está también previsto que, a lo largo de la mañana, se conozca el resultado de la autopsia practicada a la esposa del presunto homicida, Mari Luz Alejo, y a su suegra, Amelia Rodríguez. El motivo de los dos homicidios sería, supuestamente, una discusión familiar por motivos económicos, según han confirmado fuentes del Departamento vasco de Seguridad. Esta hipótesis cobra fuerza para la Ertzaintza, mientras el acusado del doble crimen pasará a disposición judicial a lo largo de este viernes bajo la acusación de homicidio.

Signos de violencia en los cadáveres

El hombre fue encontrado en la mañana de ayer herido leve y atado por los pies, colgando de un montacargas, mientras se incendiaba su carpintería de madera y de aluminio en Achondo. Fueron sus empleados los que lo localizaron en ese estado. Posteriormente fue trasladado al hospital de Galdácano, donde los médicos de urgencias le diagnosticaron un traumatismo craneoencefálico y politraumatismos, todos ellos de carácter leve y que no han requerido ingreso hospitalario, de manera que fue dado de alta a las pocas horas.

La alcaldesa de Achondo, Rosa Elizburu, explicó que el dueño de la carpintería, según comentaron las personas que lo encontraron, «estaba colgado de los pies» y «tenía muchos golpes» por todo el cuerpo. Tras el hallazgo del hombre, hacia las ocho de la mañana, su cuñada acudió al domicilio de su hermana -la esposa del herido- en la cercana localidad de Abadiño para informarle del incendio en el negocio familiar. Al llegar al piso se encontró a su hermana y a su madre muertas en la cama y con signos evidentes de violencia.

Una familia normal

Este crimen ha conmocionado al municipio de Abadiño, donde nadie se explica qué ha podido ocurrir en una familia «totalmente normal», según explicaron los vecinos de la localidad.

La suegra del detenido se había trasladado recientemente a Vizcaya para estar con su hija, que acababa de jubilarse de la antigua empresa Inyectametal, según contaron algunos vecinos que conocían a la pareja. En las calles del barrio de Matiena, la población se arremolinaba en la mañana de ayer para hablar del trágico suceso, a quien nadie encuentra explicación.