Una conductora denuncia que unos encapuchados armados trataron de echarla de la carretera

cee / la voz

GALICIA

«Metín primeira e tirei para adiante. Naquel momento dábame igual se os levaba a eles ou non» relata la joven

08 dic 2014 . Actualizado a las 10:37 h.

Una vecina del Concello de Dumbría (A Coruña) de 32 años se llevó la madrugada del viernes al sábado el mayor susto de su vida, cuando tres hombres en un Mercedes de color blanco primero trataron de echarla de la carretera y luego le cortaron el paso, esgrimiendo una pistola y tapándose dos de ellos la cara con capuchas.

Los hechos, siempre según su relato, se produjeron poco después de las tres de la madrugada cuando la joven, que se dirigía a su domicilio, percibió que un vehículo la seguía. Pasó de largo de su casa y, en menos de un kilómetro, ya tenía el turismo en paralelo hasta este le adelantó y se le cruzó en su camino.

«Niso, saíronme dous, un da porta do copiloto e outro de atrás, encapuchados e cunha pistola, que non sei se era de verdade ou non, porque non esperei máis. Metín primeira e tirei para adiante. Naquel momento dábame igual se os levaba a eles ou non. De feito debín baterlles porque oín un golpe moi forte, aínda que o meu coche só lle caeu un vidro do retrovisor. Sorte que nesa zona hai unha senda peonil e quedoume sitio para fuxir, porque do contrario non sería quen de escapar e non sei que me podería pasar», relata la afectada, que todavía vio las luces del otro vehículo detrás suyo brevemente y recorrió una veintena de kilómetros antes de parar y llamar a sus padres. Estos acudieron a recogerla al lugar en el que se encontraba, la llevaron a casa y dieron aviso a la Guardia Civil, ante la que presentaron denuncia para que este miércoles el asunto sea abordado en los juzgados de Corcubión.

La afectada alberga algo más que sospechas sobre quién pudo protagonizar un episodio que califica «de película» y profundamente desagradable.

En el mes de agosto conoció a un joven de su misma edad con el que llegó a verse en menos de una decena de ocasiones. Percibió que sus actitudes no eran normales y decidió romper la relación. Desde entonces, recibe llamadas y mensajes que no contesta, lo bloqueó en un servicio de mensajería instantánea y se lo ha encontrado más de una vez, con el que dice que es el mismo vehículo del viernes, tanto delante de su casa como en los lugares que frecuenta. Unos hechos que ya había puesto en conocimiento de la Guardia Civil.

Además, justo después de lo sucedido, recibió un nuevo mensaje del que identifica como el número de teléfono de esta persona, en el que le decía que él no tenía nada que ver con lo sucedido, pero que tuviese cuidado porque era conocedor de que tres vehículos diferentes -incluso le facilitó los modelos, entre los que se encuentra el Mercedes blanco- la estaban persiguiendo.