Grandes concellos de Galicia bajan o congelan tasas en año electoral

redacción / la voz

GALICIA

Otros prorrogarán una medida que llevan aplicando varios ejercicios

24 nov 2014 . Actualizado a las 05:00 h.

La estrategia no es nueva. A menos de un año de la convocatoria de elecciones municipales -previstas para el mes de mayo- los gobiernos de ciudades gallegas como A Coruña o Ferrol han decidido congelar impuestos o tasas de cara al año que viene. Y a punto de que la mayoría de ayuntamientos ratifiquen sus presupuestos, otros como Vigo o Santiago también apoyan bajar los gravámenes.

En el caso coruñés, así se confirma tras haberse aprobado ya las cuentas para el 2015. El alcalde popular, Carlos Negreira, ya había adelantado que congelaría impuestos, algo que también materializó el Gobierno de su homólogo ferrolano, el también popular José Manuel Rey Varela. En este último municipio fue el concejal de Economía e Facenda, Alejandro Langtry, el que anunció que «la idea es la congelación de impuestos», una línea que como dice «ya hemos mantenido» en los últimos años, y que se hizo efectiva con la aprobación de los presupuestos municipales la semana pasada.

En Vigo, el asunto queda en suspenso al anunciar el alcalde su intención de prorrogar las cuentas económicas para el próximo ejercicio. El año pasado, el PP vinculó su apoyo a los presupuestos de Caballero (PSOE) para el 2014 al hecho de que los gravámenes fueran rebajados en el 2015. Si fuera así, bajarían el IBI y la basura un 1,4 %; el impuesto de circulación, un 1 % para coches de gama alta y un 2 % para los normales. El resto de impuestos se congelarán. Esta sería la primera vez que habría una bajada de este tipo, salvo un año en el que IPC fue negativo.

También en Santiago de Compostela se ha optado por la política de rebajas y congelación. El que lleva un par de años con los gravámenes congelados es Lugo, que durante este ejercicio está operando con el presupuesto prorrogado. En Pontevedra la decisión del equipo de Gobierno ha sido la de congelar los tributos y en Ourense, que acaba de aprobar las cuentas económicas del actual ejercicio, después de dos años de presupuestos prorrogados, han seguido una política similar.

Más allá de las grandes ciudades, otros concellos van a mantener su política fiscal en esa misma línea. Es el caso de Narón, donde el concejal de Xestión Presupuestaria, Pablo Villamar, explicó que se van a mantener. «O criterio que imos aplicar é o IPC, o que implica a práctica conxelación», y «vaise aplicar a tódolos tributos, impostos, tasas e prezos públicos». Prevé que el acuerdo presupuestario sea aprobado en el pleno del próximo jueves.

El Concello de Lalín decidió congelar tributos, pero bajará el agua y saneamiento un 0,5 % por el IPC negativo según el contrato con la concesionaria y de motu propio baja más de un 10 % el impuesto de vehículos y bonifica en un 50 % el de plusvalías en la transferencia de vivienda habitual. El de A Estrada también anunció bonificaciones en el IBI para el próximo año a las familias numerosas. En Burela, el equipo de gobierno anunció una bajada de impuestos a partir del 2015. Las correspondientes a vados, agua, recogida de basura, cementerio municipal, ocupación de espacios públicos con terrazas o vehículos se reducirán un 0,5 % a partir del 1 de enero. En Cervo no subirán tampoco hasta más allá del 2015.

Pero hay concellos donde llevan congelados varios ejercicios. Resulta ser el caso de Boiro, que no sube ni el IPC, desde que comenzó este mandato (2011). Tampoco repercutió en los recibos de los vecinos la subida de Sogama. En A Pobra ya los congelaron el año pasado y los mantendrán el año que viene.