Hacienda pide a Dorribo dos millones de euros por saltarse dos declaraciones de la renta

Miguel Cabana
miguel cabana LUGO / LA VOZ

GALICIA

El abogado de la Xunta descarga toda la responsabilidad del Igape en la operación Campeón en un directivo despedido

20 nov 2014 . Actualizado a las 09:58 h.

Jorge Dorribo lleva una semana en la cárcel y cada día le caen encima nuevas reclamaciones de deudas millonarias, aunque parece que no las va pagar con dinero ni con patrimonio, ya que todos los bienes de Nupel están embargados o subastados. Esta semana se presentaron en el juzgado lucense de Instrucción número 3 los escritos de las partes implicadas en el caso, para unir a la petición de la jueza y del fiscal y abrir juicio oral. Y una de las presentadas fue la Agencia Tributaria, que se siente perjudicada porque Dorribo no hizo su declaración de la renta en los años 2010 y 2011, dejando de ingresar en ambos años 466.207 euros, según los cálculos de Hacienda.

En el escrito presentado por la Abogacía General del Estado, Hacienda solicita dicha cantidad, con los intereses legales en vigor incrementados en un 25%, y que además se le imponga una multa por el triple de la cantidad no declarada. En definitiva, casi otros dos millones de euros sobre Dorribo, al margen de las multas de casi 16 millones de euros que le reclama el fiscal. Sin embargo, si no paga estos casi dos millones a Hacienda, serán sustituidos por 180 días de privación de libertad.

Un solo culpable en el Igape

Otro de los escritos recibidos en el sumario es el de los abogados de la Xunta, ya que el Igape es parte afectada por haber concedido préstamos y subvenciones de manera fraudulenta a Dorribo, porque el dinero no era para invertir en maquinaria e innovación sino para tapar deudas.

Los abogados alegan que en varias ocasiones rechazaron la subvención o el crédito del Banco Europeo solicitado por Dorribo, pero tras requerirle completar los trámites que faltaban, el empresario siempre lo hizo. Y aunque tras la investigación judicial comprobaron que eran mediante falsificaciones, durante los trámites creyeron que Dorribo había cumplido. Al único que culpan los abogados de la Xunta es a Carlos Silva, el que era subdirector de información del Igape antes de ser despedido por supuesta deslealtad -aunque recurrió su despido ante el Supremo- del que dicen que no solo transigió las irregularidades, sino que filtró a Dorribo que había una investigación judicial.