La mayoría de los accidentes de este año ocurrieron en vías sin separación entre carriles
17 nov 2014 . Actualizado a las 08:58 h.Hay preocupación en los responsables de la seguridad vial en Galicia. Las colisiones frontales en las carreteras convencionales han disparado el número de muertes en accidentes de tráfico, y en lo que va de año ya han perdido la vida 93 personas en las carreteras gallegas, solo cinco menos que las registradas en todo el año pasado. No hay una explicación fácil a lo que está ocurriendo para romper la tendencia de descenso continuo en el número de accidentes que se había iniciado en el año 2006, cuando se contabilizaron 268 víctimas mortales, aunque los expertos coinciden en destacar que cada vez será más difícil reducir la cifra de siniestros mortales.
El choque frontal del sábado, con cuatro fallecidos, ha contribuido a aumentar esa preocupación porque es el tipo de accidente más temido por sus graves consecuencias. En una colisión de frente entre dos vehículos hay muy pocas posibilidades de salir sin lesiones de gravedad. La extensión de autovías y autopistas en los últimos años han contribuido al descenso de ese tipo de accidentes al eliminarse la posibilidad del choque frontal. Pero Galicia tiene una de las redes de carreteras convencionales (las que carecen de separación física entre los dos sentidos de circulación) más largas de España. Y en ellas es donde se producen ese tipo de accidentes porque una mínima distracción al volante puede terminar con un coche invadiendo el carril contrario. Eso es, a falta de las conclusiones de la investigación que está realizando la Guardia Civil de Tráfico, lo que pudo haber pasado en el accidente ocurrido en el corredor Brión-Noia en la tarde del sábado.
Ya los datos de accidentalidad del mes de octubre situaban las colisiones frontales, junto a las salidas de vía, como el tipo de siniestro más frecuente en Galicia. Son, además, siniestros en los que se suelen registrar varias víctimas, como en el de Rois y en el que se registró hace unos días en el corredor de Sarria. La violencia del choque es tremenda y los ocupantes de los coches apenas pueden protegerse del impacto.
El mayor número de siniestros
En Galicia, la mayoría de los accidentes mortales ocurren en las carreteras convencionales. La estadística de la siniestralidad es clara y muestra que ese tipo de vías se convierten año tras año en las que registran el mayor número de siniestros mortales. Por eso la Dirección General de Tráfico centra sus campañas en la vigilancia en ese tipo de vías, con el incremento de la presencia de radares móviles de la Guardia Civil de Tráfico y con controles de alcoholemia.