La familia ourensana envenenada por comer setas sigue ingresada en la uci

m. Rodríguez OURENSE / LA VOZ

OURENSE CIUDAD

Solo uno de los hijos que viven en la casa paterna se salvó de la intoxicación al no comer el plato porque no le gustaba

02 nov 2014 . Actualizado a las 05:00 h.

Las tres personas de una familia ourensana que fueron ingresadas entre la medianoche y la mañana del jueves por una ingesta de setas venenosas continúan ingresadas en la unidad de cuidados intensivos del Complexo Hospitalario Ourensán. No ha habido grandes cambios en el estado de los tres pacientes, que resultaron gravemente afectados tras haber comido setas en su casa de Seixalbo, en el municipio de Ourense.

Ayer, en el pueblo, los vecinos seguían preocupados por la situación de los tres ingresados, el matrimonio formado por Abilio Vieira, de 66 años, y María de Amorín, de 59, y de su hijo pequeño, de 36, Pablo de Amorín Vieira. La familia, de origen portugués pero hace años asentada en Seixalbo, es apreciada por los vecinos, que los consideran «boa xente e traballadores». Solo uno de los hijos que viven en la casa paterna, Carlos, se salvó de la intoxicación al no haber probado el plato de setas porque no le gustaban. Todavía no se sabe con seguridad qué especie de seta fue la que causó el envenenamiento de la pareja y su hijo, aunque los expertos en micología apuntan, por la gravedad de los síntomas conocidos, a la amanita phalloides. La mujer y el descendiente quedaron afectados hasta la inconsciencia y al marido aún le dio tiempo a moverse para poder pedir ayuda a un vecino. Este fue el que llamó a las urgencias médicas, que atribuyeron la intoxicación a los hongos pues encontraron restos de la comida en dos platos cuando llegaron para atender a los afectados.

Los efectos de la amanita phalloides se notan unas nueve horas después de la ingesta. Otras setas pueden actuar al cabo de treinta minutos, aunque sus tóxicos suelen provocar vómitos.