El cementerio que César Portela diseñó para Fisterra estará listo 15 años después

Juan Ventura Lado Alvela
J. V. Lado CEE / LA VOZ

GALICIA

El cementerio, obra del arquitecto César Portela, se encuentra en el monte de O Cabo.
El cementerio, obra del arquitecto César Portela, se encuentra en el monte de O Cabo. José Manuel Casal< / span>

Con una subvención del Fondo de Compensación Ambiental, el Concello de Fisterra, trata ahora de poner en marcha un proyecto

23 oct 2014 . Actualizado a las 05:00 h.

El cementerio de César Portela en Fisterra, finalista de los premios Rotthieer y Mies Van der Roche y puesto como referencia en medio centenar de revistas especializadas para haber encontrado la luz después de casi 15 años de oscuridad burocrática, trámites interminables y el avance continua de la maleza entre la singular obra arquitectónica.

Con una subvención del Fondo de Compensación Ambiental, el Concello de Fisterra, trata ahora de poner en marcha un proyecto, barato para lo que significa este conjunto y que daría solución al principal problema que tiene empantanada la infraestructura, que es la falta de suministro eléctrico.

La solución con un gasto inferior a los 30.000 euros consiste en instalar paneles solares que alimentarán unos seis o siete puntos de luz con tecnología LED, según explica Manuel Carro, el arquitecto del Concello que está a cargo de este proyecto y en contacto con Portela, quien ve con buenos ojos que su obra, al fin, pueda entrar en funcionamiento.

«O tema da auga témolo fácil de solucionar o complicado estaba en levar a luz porque unha liña subterránea, ademais dende un punto tan distante, resultaba moi custosa economicamente. Os paneis solares antes eran moi pouco produtivos pero hoxe teñen un rendemento superior que nos da de sobra para a instalación con entre catro e seis metros cadrados de superficie, co que apenas hai impacto na zona. A parte, xa non só os hai negros, os acabados evolucionaron e pódense facer cun ton de aceiro ou parecido ao granito co que van pasar case desapercibidos», detalla el técnico.

Según señalan tanto Carro, como el alcalde, José Manuel Traba, el objetivo de este proyecto, que consideran un paso definitivo para el futuro del cementerio, es «poñelo en funcionamiento». A partir de ahí, las otras dos fases aún por construir se irán haciendo en función de la disponibilidad económica.

El proyecto para poner en marcha el cementerio necesita básicamente cuatro permisos de Administraciones ajenas a la municipal. El primero de ellos, del Instituto de Estudios do Territorio, que depende de la Consellería de Medio Ambiente, ya está concedido y tanto el de Augas de Galicia, por la influencia sobre el regato de Cabanas, como el del Servicio de Conservación da Natureza, no deberían suponer mayores dificultades, con lo que la última palabra en todo esto la tiene Patrimonio.