El PSOE emplaza al presidente de la Xunta a disculparse con las mujeres gallegas por ser uno de los «animadores» de una reforma «retrógrada»
24 sep 2014 . Actualizado a las 14:17 h.El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijoo, evitó retratarse este miércoles en la misma alineación que el ministro Ruiz-Gallardón, después de que el PSOE lo acusara de ser uno de los «animadores» de la «retrógrada» reforma de la ley del aborto. Y lo hizo el dirigente popular invocando las actas del Parlamento gallego para sostener que si algo van a reflejar es que en el PP gallego «mantivemos a nosa coherencia» favorable a la mejora del proyecto, como el ministro de Justicia «mantivo a súa» anunciando ayer su dimisión.
El portavoz de los socialistas, José Luis Méndez Romeu, retocó ligeramente su pregunta en la sesión de control para colgarse de la actualidad y decirle al PP: «Acertan cando rectifican». Porque tras un año de «tensión social», dijo, los populares al fin comprendieron que no se pueden imponer «tutelas reaccionarias ás mulleres» ni retroceder en los derechos consolidados. Y le espetó a Feijoo: «Debería pedir disculpas ás mulleres galegas», señaló Méndez, tras acusar al jefe del Ejecutivo de haberse «destacado por ser un dos animadores» de la reforma, palabras que fueron recibidas con abucheos en la bancada popular.
Posición fría y distante
Feijoo apeló a revisar las actas parlamentarias y las publicaciones de los medios para dejar claro que su posición fría y distante ante la reforma de la ley del aborto. De hecho, en diciembre se sumó a los barones del partido críticos con el proyecto de Ruiz-Gallardón arguyendo que valía la pena «mellorar» el texto para que tuviera mayor consenso, si bien el grupo del PP tumbó dos meses después una iniciativa del PSdeG, AGE y BNG en la que se pedía, precisamente, aparcar la reforma de Ruiz-Gallardón.
Pero Feijoo optó por defenderse del ataque del PSOE con un rápido contraataque cambiando de asunto. Si por un lado reclamó que se reconociera la «coherencia» del PPdeG ante el aborto, por el otro puso de relieve que podía hacer lo mismo con la posición de los socialistas ante la consulta soberanista de Cataluña. «Lamentablemente non podo felicitado pola coherencia», le espetó a Méndez el líder popular, antes de relatar que, en Cataluña, los socialistas apoyaron el derecho a decidir; en Madrid, dijeron que no; y en el Ayuntamiento de Barcelona «puxéronse na tribuna para non ter que votar nin si nin non», zanjó.