Ingresado en un centro de menores el niño que agredió a su madre en Verín

j. m. pan / p. seoane REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

El fiscal cree que el chico, de 13 años, no puede regresar a su casa

12 sep 2014 . Actualizado a las 11:27 h.

El niño de 13 años que le pegó una paliza a su madre en Verín ingresó ayer en un centro de menores de Ourense. Así lo decidieron la Fiscalía y los responsables del Sistema de Protección de Menores de la Xunta después de que se le realizase al menor un examen psiquiátrico en la unidad de infantil de salud mental del Complexo Universitario de Ourense. El fiscal de Menores que dirige la investigación del caso explicó ayer que al menos en este momento el menor no puede estar con su madre, que ya está en su domicilio.

Los responsables del centro ourensano en el que quedó ingresado el menor realizarán un seguimiento intensivo al chico, sobre todo en los primeros días de ingreso. Se trata de comprobar cómo evoluciona el comportamiento del joven después de que supuestamente le pegase una paliza a su madre, de 37 años, el pasado viernes día 5. La mujer tuvo que ser ingresada de urgencia en el Hospital Povisa de Vigo, donde fue operada para tratar de reducirle las fracturas que presentaba en la cara y que en los primeros exámenes médicos fueron calificadas como graves.

La Guardia Civil de Verín tuvo conocimiento del suceso unos días después a través de una llamada anónima, probablemente de un familiar de la víctima, en la que se informaba de que un menor le había pegado una paliza a su madre y esta había tenido que ser ingresada en un hospital. Los agentes pronto comprobaron quién era el supuesto autor de la agresión y pusieron los hechos en conocimiento de la Fiscalía. En un principio la madre no quiso denunciar a su hijo por la agresión, pero ayer el fiscal de Menores de Ourense confirmó que la mujer presentó ayer la correspondiente denuncia ante la Guardia Civil.

Inimputable por unos días

Tras tener conocimiento de la brutal agresión, la Fiscalía de Menores de Ourense abrió unas diligencias penales previas, que finalmente se cerraron y fueron transformadas en un expediente de protección de menores al comprobar que el supuesto autor de los hechos tenía menos de 14 años, con lo que tenía la condición de inimputable, siguiendo una instrucción dictada por la Fiscalía General del Estado sobre delitos cometidos por menores. Esa circunstancia ha sido decisiva en este caso ya que el chico tenía 13 años en el momento de los hechos, el pasado viernes 5, pero un par de días después cumplió 14, con lo que ya se le podría ser aplicada la legislación penal como supuesto autor de un delito de lesiones, según informó el fiscal.

El Sistema de Protección de Menores de la Consellería de Benestar se encargará ahora de la realización del seguimiento del niño para conocer su evolución y su comportamiento en el centro en el que está ingresado e informará a la Fiscalía de cualquier novedad que se produzca. Ese seguimiento y evaluación casi diarios sobre el estado del muchacho serán los que determinen las decisiones posteriores que adopte la Fiscalía de Menores, ya que la medida de ingreso en el centro especial es temporal, y dependerá de de nuevos exámenes médicos.

La Xunta realizará un seguimiento al muchacho para comprobar su evolución

La madre, de 37 años, denunció ayer a su hijo ante la Guardia Civil por la agresión