«Abuela, estoy desayunando leche con cereales»

maría santalla REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

La familia de Buenos Aires a la que Amigos de Galicia envió ayuda alimentaria recibe en su domicilio los lotes de víveres

02 sep 2014 . Actualizado a las 11:54 h.

Que un niño desayune leche con cereales no debería ser noticia. Sin embargo, para la pequeña Malena sí lo es, y por eso cuando este fin de semana habló por teléfono desde Argentina con su abuela Carmen en Galicia, lo primero que le dijo fue precisamente eso: «Abuela, estoy desayunando leche con cereales». Malena pudo hacerlo gracias a la ayuda alimentaria que su familia recibió en su domicilio de Pergamino, en Buenos Aires, gracias a la Fundación Amigos de Galicia.

Carmen Losada, vecina de Vilagarcía, había recurrido a esta organización para pedir ayuda para su hija Mariana y sus tres nietas, Florencia, Esmeralda y la propia Malena, de once, nueve y siete años. El padre de estas murió recientemente y hasta dentro de algunos meses no podrán percibir la pensión que les corresponde, así que su situación era desesperada. Su hija, relataba Carmen hace unos días, hacía solo una comida diaria, y aunque ella le ayudaba en lo posible, su apoyo no era suficiente. Amigos de Galicia le prometió buscar la manera de enviar comida y artículos de primera necesidad a las cuatro mujeres que viven en Argentina, y no ha tardado en cumplir su promesa: este fin de semana, Mariana y las tres pequeñas recibieron varios paquetes con alimentos en su vivienda, suficientes para garantizar su alimentación durante algunas semanas. El encargado de entregárselos fue el director gerente de Expourense e integrante de Amigos de Galicia, Alejandro Rubín.

Pero no es esta la única buena noticia que esta familia con raíces en Galicia recibió este fin de semana. El gobierno municipal de la provincia de Buenos Aires, conocedor de la situación precaria de Mariana y sus hijas, les ha concedido una vivienda de forma gratuita durante un año, de tal manera que a lo largo de los próximos doce meses podrán olvidarse del dinero del alquiler. En ese nuevo domicilio recibieron los alimentos enviados desde Galicia.

Carmen Losada, que regresó de Argentina a Galicia hace una década, no sabía ayer cómo agradecer a Amigos de Galicia su ayuda, que en esta ocasión no se quedó en la comunidad gallega, en la que socorren a más de treinta mil personas entregándoles comida o pagando sus recibos, sino que voló a miles de kilómetros.