El 44 % de los gallegos vive en los municipios atravesados por la AP-9

Carlos Punzón
carlos punzón REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

La franja del vial sumó un 40 % de población y el resto de Galicia cayó un 14

17 ago 2014 . Actualizado a las 11:02 h.

Los 21,5 millones de metros cuadrados que ocupa la autopista del Atlántico acogen a sus lados la franja poblacional más dinámica de Galicia. Solo los 38 municipios por los que pasa el asfalto explotado por Audasa sumó hasta hoy 353.955 habitantes al conjunto de su censo desde que la principal infraestructura viaria de comunicación comenzó a construirse en los años setenta. En ese mismo tiempo el resto de la comunidad perdió nada menos que 264.418 vecinos y Galicia en su totalidad ganó un raquítico volumen de 89.537 personas en esos últimos cuarenta años.

La dependencia de la autopista es por tanto cada vez mayor para la población y empresas que se asientan en sus márgenes al concentrar ahora al 44,4 % del censo de Galicia, mientras que antes de su existencia las localidades en las que se asienta la AP-9 representaban solo el 32 % del total residencial de la comunidad.

La franja atravesada por el vial de pago cuenta hoy con 1.229.312 vecinos de los 2,7 millones que componen Galicia, cifra que justo antes de que entraran en funcionamiento los primeros tramos de la autopista llegaba solo a 875.357. La evolución poblacional en el resto del mapa autonómico es negativa, al pasar de los 1,8 millones de habitantes del arranque de los años setenta a 1,53 millones. Un crecimiento residencial por tanto del 40,4 % en los municipios en los que se asienta la AP-9 y una caída del 14,7 % en el resto.

Una franja más amplia

Las cifras aún se dispararían más en ambos sentidos si a las localidades que atraviesa la autopista se suman las que sin acceso directo se sitúan en su entorno más próximo y tienen también un alto grado de dependencia de sus servicios. Cangas, Bueu, Marín, la comarca del Salnés y la de Barbanza completan un mapa en el que viven ya algo más de uno de cada dos habitantes de Galicia.

Solo los nueve municipios más interiores y más afectados por la crisis industrial de entre todos los vecinos de la AP-9 han perdido población desde que se comenzó a construir la infraestructura. Esos son los casos de Abegondo, Cabanas, Paderne, Pontedeume, Portas, Valga, Meis, Neda y Ferrol, ciudad que ha perdido casi diez mil vecinos desde que se trazó el diseño de la AP-9, que no llegaría a sus límites sin embargo hasta el año 2000.

1.753 millones de kilómetros

La alta densidad poblacional que arropa a la autopista la convierte en la duodécima de España en intensidad media de vehículos que la atraviesan, colocándose en el grupo de cabeza junto a los principales peajes de Cataluña, Madrid, País Vasco o la Costa del Sol. Eso sí, la negativa evolución de todo el sector de autopistas del Estado se ha dejado notar en los últimos años de manera más intensa en la AP-9, pues según el último análisis hecho por el Ministerio de Fomento y relativo al 2012, es la decimoséptima que más tráfico perdió en ese año de las 43 concesiones existentes al caer un 11,69 % su intensidad media.

Pese a ese descenso, los números de los técnicos del ministerio señalan que los coches que han utilizado tanto sus tramos de pago como los gratuitos han recorrido en ese año 1.753,9 millones de kilómetros, la tercera cantidad más alta de todo el Estado.