Un joven se mata de un tiro ante tres amigos dentro de un coche en Castro de Rei

Suso Varela Pérez
suso varela LUGO / LUGO

GALICIA

Investigan la procedencia del revólver con el que se disparó en Castro de Rei

04 ago 2014 . Actualizado a las 09:29 h.

Dos parejas salieron de tomar algo pasada la medianoche de ayer de un bar céntrico de Castro de Ribeiras de Lea (Castro de Rei), se metieron en un Audi A3 aparcado enfrente con la intención de ir a las fiestas en la cercana parroquia de Duarría y en menos de cinco minutos uno de ellos se mató de un tiro en la sien, sin apenas mediar palabra. Lo que pudo pasar por la cabeza de Adrián Díaz Fernández -de 19 años y natural del vecino concello de Pol- nadie lo sabe, aunque algunas fuentes no descartan que pasase un mal momento personal.

El hecho dejó impresionados a sus tres acompañantes y a los clientes que llenaban en ese momento el bar. Según las declaraciones efectuadas ante la Guardia Civil de Lugo, los tres jóvenes que estaban junto al fallecido (las chicas en la parte delantera del coche y los chicos en la trasera) explicaron que su amigo amenazó con dispararse, pero lo interpretaron como una broma. La primera persona que auxilió al joven, un cliente del bar que oyó el disparo, apuntó que alguno de los ocupantes del vehículo comentó que Adrián Díaz dijo: «Mirade o que teño aquí», para a continuación dispararse con un revólver en la sien.

«Tenía el arma entre las piernas y manaba mucha sangre, mientras su amigo intentaba taparle la herida en la cabeza entre convulsiones», relató el hombre que primero auxilió al aún herido. Al lugar acudieron dos ambulancias y dos patrullas de la Guardia Civil que acordonaron la zona, pero mientras no llegaron los servicios médicos entre varias personas sacaron del coche el cuerpo aún con vida de Adrián Díaz. Su estado, según explicaron, era de extrema gravedad. Cuando llegaron los sanitarios, estabilizaron su situación antes de llevarlo hacia el hospital de Lugo.

Según fuentes de la investigación, la hipótesis principal que se maneja sobre el suceso es la del suicidio y se descarta que fuese una imprudencia del joven o una broma de los muchachos mientras estaban dentro del coche, por la precisión del disparo en la cabeza.

Investigan si tomó sustancias

Aun así, al cuerpo de Adrián Díaz se le hizo ayer por la mañana la autopsia, que además de determinar cómo pudo ser el disparo mortal también determinará si se encontraba bajo los efectos de alguna sustancia. Los resultados de las pruebas practicadas aún tardarán unos días en estar en poder de la Guardia Civil.

Otro punto en el que se centra ahora la investigación es la procedencia del revólver con el que se disparó el joven. Las fuentes consultadas señalan que no se sabe el origen, pero se descarta que fuese una arma reglamentaria. Los análisis de la misma comenzarán hoy mismo para determinar de qué tipo era. Por este motivo, aunque se trate de un caso de un supuesto suicidio, las diligencias siguen abiertas.

Adrián Díaz Fernández será enterrado mañana, a las seis de la tarde, en la iglesia parroquial de Valonga, en Pol. Su cuerpo ya es velado desde ayer por la tarde por sus familiares y amigos en el tanatorio San Roque, de Meira.