Con la ayuda de un tablero espinal se pudo colocar al hombre sobre una camilla especial, que luego se sacó al exterior por un gran ventanal, y se fijó en el vehículo de los bomberos
28 jul 2014 . Actualizado a las 07:00 h.Los servicios de emergencia de municipio coruñés de Culleredo, reforzados por los bomberos del parque de Arteixo, participaron ayer en un dispositivo especial para ayudar a evacuar a un enfermo de más de 250 kilos de peso, que no se podía mover y cuyo estado de salud era muy grave, por lo que tenía que ser trasladado al servicio de Urgencias del Complexo Hospitalario Universitario de A Coruña (Chuac).
La llamada de emergencia se registró sobre la una de la tarde, y ante la imposibilidad de sacarlo por la puerta de la vivienda, situada en el primer piso del número 133 de la avenida de Vilaboa, se decidió solicitar la presencia de los bomberos de Arteixo, que cuentan con una autoescala con la que accedieron a la ventana del dormitorio en la que se encontraba el enfermo. Una vez dentro de la habitación, y con la ayuda de un tablero espinal, se pudo colocar al hombre sobre una camilla especial, que luego se sacó al exterior por un gran ventanal, y se fijó en el vehículo de los bomberos. A continuación, bajaron al enfermo al suelo y lo metieron en una ambulancia, que fue la encargada de llevarlo al servicio de emergencias hospitalario para que le atendiesen. Para realizar todo el traslado del paciente se precisó la colaboración de hasta ocho personas, entre efectivos del 112, policías y miembros de Protección Civil de Culleredo, además de los bomberos. Todos ellos fueron los encargados de levantar en el aire al enfermo y colocarlo encima de la camilla especial.
Una vez en el Chuac, el paciente -con iniciales J.?V.?F.- permaneció varias horas en el servicio de Urgencias del complejo hospitalario coruñés, puesto que su estado era bastante grave a consecuencia de un problema de insuficiencia respiratoria, que se había complicado con otras dolencias propias del peso del enfermo. Según informaron fuentes del centro sanitario, la intención de los facultativos era poder estabilizarlo primero en el servicio de Urgencias, para posteriormente dejarlo ingresado en planta y seguir allí con el tratamiento adecuado.